Los carbohidratos han sido una excelente fuente de calorías a lo largo de nuestra historia evolutiva, cuando obtener suficientes alimentos era una lucha constante. Científicos de EE UU han descubierto que el gen de la saliva responsable de digerir el almidón podría haberse duplicado por primera vez hace más de 800 000 años, antes de la llegada de la agricultura.
El análisis genómico de un individuo de esta especie, apodado ‘Thorin’ y descubierto en las cuevas del valle del Ródano en Francia, sugiere que su población, aunque coexistió y vivió a unos diez días de camino de otras, se ignoraban.
Un estudio, realizado por antropólogos y otorrinos de HM Hospitales y las universidades de Alcalá y Valencia, demuestra que este es el primer caso conocido de la existencia de homininos con síndrome de Down de una especie distinta a la nuestra. La pieza clave del trabajo reside en un pequeño fragmento craneal de la región del oído derecho procedente del yacimiento valenciano de Cova Negra.
Uno de los grandes desafíos de la arqueología prehistórica consiste en precisar la escala temporal en la que se llevaron a cabo actividades humanas en el Paleolítico. Este estudio lo ha delimitado gracias a nuevas técnicas arqueomagnéticas en varios fuegos neandertales de la unidad X del yacimiento alicantino de El Salt.
Han hallado pruebas de esta práctica en empuñaduras de utensilios de hace 40.000 años muy bien conservados. El descubrimiento de este adhesivo, que supone una solución técnica compleja, implica un alto nivel de cognición.
Los humanos modernos se expandieron hacia el noroeste de Europa antes de lo que se pensaba, siendo coetáneos de los neandertales que miles de años después desaparecerían en el suroeste. El Homo sapiens se adaptó bien al frío, en un ambiente muy similar al de la actual estepa rusa, y entre su dieta destacaba la carne de reno, lobo y caballo.
Hace 10.000 años, los primeros agricultores procedentes de Anatolia disminuyeron los niveles de ascendencia neandertal europea. Este es el principal hallazgo de un estudio genómico de la Universidad de Ginebra, en Suiza, que explica por qué en esta zona hay menos rastro de la especie extinta que en el este de Asia en la actualidad.
Científicos del instituto IPHES, la Universidad de Barcelona, el Museo Nacional de Ciencias Naturales (CSIC) y otros centros han dado a conocer 54 restos neandertales correspondientes al menos a tres individuos: una mujer, un joven y un niño.
Durante la campaña de este año en el yacimiento Abric Romaní en Cataluña se han recuperado más de 1.000 restos, entre herramientas de piedra, animales y hogares.
La campaña de excavación en la Cova de les Teixoneres ha permitido recuperar dos fragmentos de cráneo de un neandertal juvenil de 52.000 años de antigüedad. Con estos restos son al menos cuatro los individuos de distintas edades recuperados en el yacimiento. Los estudios efectuados hasta ahora apuntan a que los cadáveres fueron procesados y posiblemente consumidos por sus congéneres.