Un equipo internacional de científicos, con participación española, ha secuenciado el ADN del orangután de Sumatra (Pongo abelii). La secuenciación posterior de otros cinco orangutanes de Sumatra y cinco de Borneo (Pongo pygmaeus) arroja luz sobre la evolución de los grandes simios (incluidos los humanos) y demuestra la gran diversidad genética de estas especies.
Investigadores del Centro Oncológico del Hospital General de Massachusetts (EE UU) han descubierto que determinadas secuencias de ADN, conocidas como “repeticiones por satélite”, experimentan una sobreexpresión masiva cuando aparecen tumores. La investigación de este fenómeno supone un paso importante en el mejor diagnóstico y conocimiento del cáncer.
El Grupo BIOMICs, con sede en el campus de Álava de la Universidad del País Vasco (UPV/EHU) cuenta con numerosos investigadores especialistas en diversas áreas de la genética (neurodegenerativa, del cáncer, forense…), y colaboraciones con hospitales y universidades de la CAV y de todo el mundo.
Investigadores de la Universidad de Alcalá de Henares (UAH) patentan una técnica para facilitar la búsqueda de moléculas que se unen al ADN, lo que posee una posible actividad anti-cancerígena al permitir analizar grandes “quimiotecas” y abaratar el proceso. Este nuevo método sólo necesita pequeñísimas cantidades de cada compuesto y además se tarda muy poco tiempo en obtener los datos.
Un equipo coordinado por el Instituto de Biología Evolutiva (CSIC-Universidad Pompeu Fabra) ha analizado la sangre de un pañuelo que alguien usó el día en el que fue guillotinado el rey de Francia Louis XVI en 1793. Los restos han sido hallados dentro de una calabaza decorada con técnica pirográfica, donde fue depositado el pañuelo. Los patrones genéticos podrían corresponderse con los del rey galo.
Gracias a los nuevos avances tecnológicos en secuenciación genómica, sabemos que gran parte del genoma se transcribe de ADN a ARN.
Un equipo internacional de científicos de 37 instituciones, con participación española, ha secuenciado el genoma de Culex quinquefasciatus, el mosquito que trasmite la enfermedad del Nilo Occidental. Junto a la secuenciación de los genomas de otros dos mosquitos (el que trasmite la malaria y la fiebre amarilla y el dengue), el estudio, que se publica en Science esta semana, permitirá encontrar nuevas estrategias para la lucha contra esta enfermedad.
Voluntarios limpiando la playa de Nemiña (Galicia) en 2003, tras el desastre ecológico del Prestige. Foto: Colin Brace.