La humanidad conoce los beneficios de las algas marinas desde tiempos inmemoriales, y hoy también se han introducido en la alta cocina. José Lucas Pérez Llorens, catedrático de Ecología de la Universidad de Cádiz, lleva años investigándolas y divulgando sus propiedades, además de trabajar con plantas acuáticas como el 'cereal del mar'.
Entre 4,8 y 12,7 millones de toneladas de plásticos terminan en las aguas marinas, lo que resulta en la presencia de millones de partículas de macroplásticos y microplásticos flotando en nuestros mares. Son datos que recoge un nuevo informe de SEO/BirdLife, presentado este jueves durante el Día Mundial de los Océanos.
Un trabajo liderado por el Instituto Español de Oceanografía (IEO-CSIC) muestra que desde 1993 el nivel del mar sube 2,8 milímetros cada año. La mitad de ese ascenso se atribuye a la fusión de los hielos de Groenlandia y la Antártida.
Un equipo científico ha logrado identificar los genes que permiten a los peces teleósteos marinos hidratar los huevos para que floten y se dispersen, y logren sobrevivir. Los mecanismos identificados aportan nuevos datos sobre la evolución de los teleósteos, grupo al que pertenece casi el total de los peces marinos actuales, cuyos antepasados se aventuraron a pasar del agua dulce al dominio salino.
Los investigadores de este estudio, que publica la revista PLoS ONE, creen que a este ritmo y si no existe un control, la entrada de plástico en los océanos podría acelerarse 2,6 veces de ahora a 2040.
Científica de exploración oceánica, divulgadora y emprendedora, la estadounidense Rachael Miller ha creado Cora Ball, un dispositivo que permite filtrar los microplásticos que desprende la ropa al ser lavada. En una visita a Barcelona, habló sobre el riesgo que supone el vertido de estos residuos en las aguas urbanas, que acaban yendo a parar al mar y son ingeridos por las especies que lo habitan.
Al pie de la cordillera de los Andes, científicos e ingenieros argentinos diseñan, fabrican, integran y testean la próxima generación de instrumentos de teleobservación que, desde su órbita, monitorearán los cultivos, mares, costas y emergencias ambientales de la región. Se consolida una nueva era espacial en América Latina impulsada por el deseo de su independencia tecnológica.
Polinizador del mar, así denomina al isópodo Idotea balthica un equipo internacional de científicos por su capacidad de fecundar al alga roja Gracilaria gracilis. Estos diminutos crustáceos transportan los espermatozoides del alga en su cuerpo y aumentan su fecundación.
Se ha subestimado la proporción de contaminación marina por petróleo causada por la actividad humana en todo el mundo. La mitad de los hidrocarburos en los océanos no proviene de fuentes naturales como se pensaba hasta ahora.