Casi el total de muertes por paludismo en el mundo están causadas por Plasmodium falciparum, un parásito que muta constantemente para sobrevivir a los tratamientos. Investigadores de EE UU han desarrollado un nuevo compuesto que ha mostrado resultados exitosos en un modelo de ratón modificado para portar sangre humana, desarrollado en el Centro de I+D de GSK en Tres Cantos, Madrid.
Un estudio liderado por el Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva de Alemania, con la participación las universidades de Valencia y Alicante, ha reconstruido la historia evolutiva de esta enfermedad, transmitida por la picadura del mosquito Anopheles, en los últimos 5500 años. El trabajo ha identificado el colonialismo como uno de los factores principales en su dispersión.
América Latina vive la peor epidemia de dengue de las últimas décadas. Según este historiador canadiense, se trata de un episodio más de la ancestral guerra contra nuestros enemigos más mortíferos: los mosquitos, pequeñas criaturas que han dirigido el curso de la historia humana con las enfermedades que transmiten.
Un estudio publicado en Science identifica una bacteria que evita que el parásito de la malaria complete su ciclo dentro de los mosquitos. Este hallazgo podría proporcionar un arma adicional contra la propagación del paludismo en el mundo.
Los resultados proporcionan una información crucial para el desarrollo de vacunas y tratamientos, ya que ayuda a identificar posibles proteínas útiles para el control de las enfermedades infecciosas.
Los finalistas de este año están encabezados por un tipo de medicamentos inyectables prometedores para los problemas de salud asociados a la obesidad. Además, también aparecen en el ranking, el desarrollo de terapias con anticuerpos que pueden ralentizar la neurodegeneración en los enfermos de alzhéimer o el descubrimiento de fuentes naturales de hidrógeno bajo la superficie de la Tierra.
Cada año se producen en el planeta unos 700 millones de infecciones por picaduras de estos animales, de las cuales casi un millón deriva en la muerte de la persona. Un equipo estadounidense ha diseñado una aplicación que cuenta con la colaboración de los usuarios y permite vigilar la ubicación y el desarrollo de los insectos para evitar la transmisión de enfermedades.
Un ensayo realizado con 450 participantes de entre cinco y 17 meses de edad en Burkina Faso, ha logrado unos resultados que cumplen con la hoja de ruta marcada por la OMS de una vacuna contra la malaria con una eficacia de al menos el 75 %.
Aunque ahora en verano nos acordamos más de estos insectos por su molesta presencia, en muchas partes del planeta causan graves problemas de salud e incluso la muerte. Esto se debe a que algunas especies son portadoras de enfermedades como la malaria, el dengue o la fiebre amarilla, entre otras. Un equipo de científicos ha creado un cuadro de mandos global para seguirles la pista.
Un nuevo informe de la Organización Mundial de la Salud revela que las interrupciones en la provisión de prevención, diagnóstico y tratamiento del paludismo durante la pandemia ha hecho mella en la lucha mundial contra esta enfermedad. De los 11 países con mayor incidencia del mundo, solo India registró avances contra la malaria. El resto, todos ellos en África, comunicó un aumento de casos y fallecimientos.