Investigadores de las universidades de Valladolid y Viena han encontrado en la Biblioteca Nacional de España una comedia desconocida de Lope de Vega titulada La francesa Laura. Las herramientas informáticas de reconocimiento y transcripción de texto han sido esenciales para el hallazgo.
La Fundación BBVA ha galardonado a los estadounidenses David Baker y John Jumper y al británico Demis Hassabis por el desarrollo de herramientas de IA que han permitido conocer la estructura de casi todas las proteínas documentadas, tanto de humanos como de animales, plantas e incluso bacterias, un conocimiento que sirve para acelerar el desarrollo de nuevos medicamentos y vacunas, según el jurado.
Conseguir la trazabilidad de todo el sistema de inteligencia artificial, desde el principio hasta el final, es un imperativo para esta catedrática e investigadora de la Universidad de A Coruña, que bregó por llevar la sede de la Agencia Española de Supervisión de IA a la ciudad gallega. Entre las labores de esta organización está, justamente, la supervisión ética de los algoritmos.
La valenciana Quibim ha desarrollado algoritmos que permiten extraer e interpretar datos cuantificables de imágenes médicas de un tejido sin la necesidad de contar con una muestra, es decir, de forma no invasiva. Su actividad principal se centra en los tumores.
Científicos en EE UU han desarrollado un algoritmo de inteligencia artificial que analiza la huella digital que dejan los usuarios en Google y las redes sociales. De esta forma, el sistema es capaz de predecir el aumento de casos de covid-19 en un territorio con hasta seis semanas de antelación.
En el año que acaba de comenzar se potenciarán los avances en IA, cada vez más adaptada a los cambios del mundo real, así como las posibilidades del metaverso y las superaplicaciones que reúnen gran cantidad de servicios. También veremos nuevas innovaciones en tecnologías médicas y el internet de las cosas.
En diciembre ha comenzado la instalación del MareNostrum 5, el nuevo superordenador que situará España en la élite de la supercomputación europea a partir de julio de 2023. En este gigante también se integrarán los dos primeros ordenadores cuánticos españoles. Aunque, antes de que ceda el testigo, hemos aprovechado para adentrarnos en el veterano MareNostrum 4.
Ha resultado ganadora por su presencia en los medios de comunicación y por el debate suscitado en torno a su uso en múltiples campos. Se ha puesto por delante de otras 11 candidatas, entre ellas, ucraniano, ecocidio, inflación y criptomoneda.
Casi cualquiera que haya utilizado esta aplicación de IA puede haber tenido la sensación de estar ante algo disruptivo, como cuando probó el buscador de Google por primera vez. Sin embargo, las limitaciones de esta herramienta de la empresa OpenAI están en su propio diseño: no entiende las respuestas que genera. El experto Pablo Haya explica hasta dónde puede llegar la inteligencia del ChatGPT.