Investigadores de la Universidad Autónoma de Madrid, la Universidad de Barcelona y otros centros internacionales han utilizado el universo como un detector para estudiar los neutrinos. Los nuevos límites obtenidos gracias a los cartografiados de galaxias acercan el descubrimiento de la jerarquía de masas de estas misteriosas partículas y la medida de su masa.
La galaxia SXDF-NB1006-2, situada a 13.100 millones de años luz de la Tierra, se ha convertido en la más remota en la que se ha detectado oxígeno. Un equipo internacional de astrónomos liderado por investigadores japonés lo ha logrado gracias al observatorio ALMA, en Chile. Además, este oxígeno parece estar ionizado por la radiación de jóvenes estrellas, y la galaxia puede servir de prototipo para estudiar la reionización cósmica que ocurrió en los comienzos del universo.
Tenue halo de unas cuatro mil millones de estrellas alrededor de la galaxia UGC00180. / Gran Telescopio CANARIAS.
La imagen muestra la posición de la galaxia GN-z11, la más lejana descubierta hasta hoy. / NASA / ESA / P. Oesch (Universidad de Yale)
El radiotelescopio Parkes de Australia ha detectado 883 galaxias más allá de la Vía Láctea, de las que casi un tercio eran desconocidas para los astrónomos. El hallazgo se ha producido en el entorno del enigmático Gran Atractor, por lo que podría aclarar el misterio que rodea a este muro de galaxias que atrae a otras como la nuestra.
El físico británico Stephen Hawking y el ruso Viatcheslav Mukhanov son los ganadores del Premio Fundación BBVA Fronteras del Conocimiento de este año en la categoría de Ciencias Básicas. Los dos investigadores han sido galardonados por predecir y descubrir que las galaxias se formaron a partir de perturbaciones cuánticas en el principio del universo.
Ilustración de la supernova superluminosa ASASSN-15lh vista desde un exoplaneta situado a unos 10.000 años luz de distancia en su galaxia anfitriona. / Beijing Planetarium/Jin Ma
La explosión estelar o supernova ASASSN-15lh, que estalló a 3.800 millones de años luz de la Tierra, ha pulverizado el récord de luminosidad observado hasta ahora en este tipo de objetos. Durante su pico de intensidad llegó a brillar 570.000 millones de veces más que el Sol. Se desconoce qué misteriosa fuente de energía es capaz de desencadenar una explosión tan colosal.