La biotecnología es la industria con más intensidad de inversión en I+D y en contratación de investigadores, según señala el último informe de la Asociación Española de Bioempresas, presentado hoy en Madrid. El documento indica además que las empresas del sector generaron en 2021 más de 10.300 millones de euros renta, el 0,9 % del PIB.
La ministra de Ciencia e Innovación, Diana Morant, ha destacado que en los en presupuestos del próximo ejercicio la ciencia dispondrá de 3.843 millones de euros, “la mayor inversión en I+D de la historia”, con casi el doble de recursos que en 2020 y cerca de un 90 % más en solo dos años.
Las corporaciones farmacéuticas no están obligadas a revelar sus costes de I+D, cuánto dinero público reciben para el desarrollo de un medicamento o qué precios cobran en diferentes países. Silvia Mancini, experta en Salud Pública y responsable de Asuntos Humanitarios de Médicos Sin Fronteras en Roma, es testigo del paso pionero que acaba de dar Italia al exigir una mayor claridad a la industria.
La COVID-19 ha demostrado que Europa no puede garantizar la seguridad de sus ciudadanos en una crisis sanitaria, según un manifiesto publicado hoy por catorce institutos de investigación biomédicos europeos. En el documento piden a la UE que invierta 150 mil millones de euros en su próximo programa de investigación e innovación.
La Organización Mundial de la Salud ha iniciado un megaestudio que involucra ya a diez países y que incluirá miles de pacientes para probar cuatro tratamientos. El diseño prima ante todo la velocidad y se espera tener resultados en un mes. El análisis de los datos será crucial para no confundir urgencia con precipitación.
Dos estudios en pacientes hospitalizados buscan frenar el desarrollo de la fase inmunológica, responsable de que sea necesario utilizar soporte ventilatorio avanzado e ingreso en UCI.
Las empresas biotecnológicas contribuyeron de forma directa, indirecta e inducida a la generación de 90.000 millones de euros de renta en España en 2015, lo que supuso en torno al 8,6% del PIB total, según el último informe de la Asociación Española de Bioempresas (ASEBIO), que se presenta hoy en Madrid. El documento destaca la recuperación de la inversión en investigación y desarrollo que aumentó un 8,31%.
El 20 de julio, después de un fallido intento golpista, Turquía imponía un estado de emergencia que por ahora se mantiene. En estos tres meses, numerosos científicos han sido despedidos o llamados a volver del extranjero. Mientras que las autoridades turcas defienden estas actuaciones por sus conexiones con el levantamiento militar, la comunidad científica denuncia una purga excesiva, que puede hacer tambalear el avance en I+D de los últimos años.
El nuevo escenario en Turquía podría suponer un frenazo para el creciente desarrollo científico del país, que en la última década ha duplicado su inversión en I+D y su número de investigadores. Ilustración: Wearbeard
El último informe sobre indicadores de la innovación 2016 de la Comisión Europea indica que España está por debajo del promedio de la UE en este ámbito y es calificado como "innovador moderado". El ranking está liderado por Suecia, y Lituania es el país que más ha crecido en innovación.