Europa dispone desde ayer de un nuevo instrumento para analizar a golpe de ratón la salud de su sistema de investigación y desarrollo. La herramienta es a la vez un observatorio y una plataforma de apoyo a las políticas del programa Horizonte 2020 y aúna los datos clave del sistema de I+D de los países de la UE. El objetivo es proporcionar información práctica sobre las políticas de investigación e innovación europeas.
Las pequeñas y medianas empresas de construcción españolas priorizan la obtención de contratos y la producción sobre cualquier actividad de I+D. Están muy concentradas en las actividades del día a día y no dedican tiempo a generar ideas creativas. Sus mejoras tecnológicas suelen ser fruto de la necesidad y tienen por objetivo resolver problemas puntuales a pie de obra. Esa innovación no se comunica ni difunde y acaba perdiéndose, según un estudio de Universidad Politécnica de Valencia.
Jack Leeming (Londres, 1992) opina que hay muchas opciones laborales para un investigador fuera del mundo académico. Además de ser editor de Naturejobs, el mayor portal de empleo científico, Leeming da consejos en su blog a los científicos que quieran crear una start-up o su propio laboratorio.
Carlos Moedas, comisario europeo de Investigación, Ciencia e Innovación, ha respondido a las preguntas del director general de la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT), José Ignacio Fernández Vera. Diplomacia científica europea, crowfunding, investigación e innovación responsables, y atracción de talento son algunos de los temas que han abordado los dos expertos. El economista e ingeniero portugués, que desde noviembre de 2014 forma parte de la Comisión Juncker, ha estado este viernes en Madrid para participar en el Fórum Nueva Economía junto con el ministro español de Economía y Competitividad, Luis de Guindos.
“El sistema de ciencia y tecnología en España no está atravesando un buen momento”, dijo ayer Jorge Barrero, director general de la Fundación Cotec. El gasto español en I+D se situó en 13.012 millones de euros, lo que supuso una caída del 2,8%, continuando la tendencia de años anteriores que ha producido un retroceso de esta partida a los niveles de 2003, según los datos del último informe de innovación de la institución.
Hoy se cumplen dos meses del anuncio del inicio de una nueva era en las relaciones internacionales cubanas, con el acercamiento de Barack Obama y Raúl Castro para normalizar las relaciones diplomáticas entre ambos países. Sin duda, la nueva situación abrirá puertas a la ciencia cubana, no solo en EE UU, sino también en Europa. Así lo asegura Maria Cristina Russo, directora de Cooperación Internacional de la Comisión Europea.
El gasto interno en Investigación y Desarrollo (I+D) en España en 2013 ascendió a 13.012 millones de euros, lo que supuso un descenso del 2,8% respecto al año anterior. Estas cifras son similares a las de 2007, como indica el último informe elaborado por el Instituto Nacional de Estadística sobre actividades en I+D.
La revista 'Nature' publica en su último número un artículo de la astrofísica española Amaya Moro-Martin, que actualmente trabaja en el Instituto de Ciencias del Telescopio Espacial (STSI) en Baltimore (EE UU), en el que hace “un llamamiento a todos aquellos a los que les preocupa la ciencia en Europa”. Además, la próxima semana se organizarán protestas en varias capitales europeas por los recortes en I+D.
La ciencia brasileña le mete goles al Mundial en el ámbito financiero. Según la revista Nature, Gobierno y empresas invierten anualmente 20.000 millones de euros en investigación y desarrollo en Brasil, frente a los 11.000 millones que recibió el torneo de fútbol. La I+D del país ha dado un gran salto desde la oscura etapa de la dictadura, hace solo una generación, y su producción científica es la tercera de mayor crecimiento en el mundo, detrás de China y Corea.