Uno de los objetivos del Acuerdo de París aprobado en diciembre de 2015 para luchar contra el cambio climático es que el aumento de la temperatura del planeta en 2100 no supere los 2 ºC, y si es posible los 1,5 ºC respecto a los niveles preindustriales. Un nuevo estudio ha planteado cuatro escenarios futuros de reducción de emisiones de CO2 y aumento de renovables, y ni siquiera en el mejor de los casos se lograría "enfriar" el planeta.
La provincia de Segovia podría compensar las emisiones de gases de efecto invernadero del tráfico rodado en los próximos 35 años por medio de medidas de gestión de usos del suelo, sin causar ningún impacto social ni pérdida de producción agropecuaria. Así lo confirma un trabajo, que centrado en esta provincia, y que ha determinado que las posibilidades de compensación son el doble de la demanda, y que de forma análoga, esta compensación podría ser también viable en otras regiones de España.
En muchos países del mundo aún se utiliza habitualmente la leña y el carbón y otros combustibles sólidos para cocinar, lo que perjudica la calidad del aire interior y exterior. Un nuevo estudio ha analizado la influencia de estas emisiones en la salud humana y en el clima, y concluye que la eliminación gradual de este tipo de cocción evitaría la muerte de 22,5 millones de personas hasta 2100 y ayudaría a reducir las temperaturas globales.
Estos días en Marrakech se están fijando los mecanismos para conseguir la meta del Acuerdo de París: reducir las emisiones de CO2 y no superar los 2 ºC de aumento de la temperatura en 2100. Alemania, seguido de EE UU y México han sido los primeros países en presentar estrategias de descarbonización para 2050. Hoy lo harán Canadá, Perú y Suiza, entre otros. España se ampara en el contexto europeo, pero con la futura ley de Cambio Climático –anunciada en diciembre de 2015 por Mariano Rajoy– pretende llegar a objetivos más ambiciosos.
Un grupo de la Universidad del País Vasco ha detectado evidencias de emisiones de tetracloruro de carbono en Parque Natural de Valderejo (Álava) y en Bilbao, a pesar de las restricciones fijadas por el Protocolo de Montreal. Esta sustancia, que deteriora la capa de ozono y es una de las causantes del efecto invernadero, puede ser cancerígena para humanos.
Investigadoras de la Universidad Politécnica de Madrid proponen un conjunto de prácticas de gestión del suelo económicamente atractivas para los agricultores que, a su vez, podrían reducir las emisiones de gases de efecto invernadero producidas en la agricultura.
Emisiones mundiales de C02 relacionadas con el sector de la energía. / Efe
Un estudio realizado por investigadores del Museo Nacional de Ciencias Naturales y del Centre de Recerca Ecològica i Aplicacions Forestals descubre que la cantidad de CO2 emitida por el suelo a través de su respiración se mantiene constante pese al decaimiento de un bosque afectado por sequía. El pino silvestre es la especie arbórea con un rango latitudinal de distribución mayor que abarca desde Siberia a la península ibérica. Su mortalidad en el área estudiada no repercute en las emisiones de CO2 del suelo forestal.
José Antonio Peñas (SINC)
Si bajan los costes del petróleo, crecen las emisiones de dióxido de carbono. Así lo aseguran dos científicos españoles que han contrastado la relación entre contaminación atmosférica y desarrollo económico utilizando como indicador los precios reales del petróleo en España de 1874 a 2011. Los científicos sugieren el diseño de unos nuevos impuestos de la energía.