Un equipo internacional en el que participan físicos de la Universidad Autónoma de Madrid ha descubierto que películas de óxido de silicio de grosor nanométrico pueden emitir grandes cantidades de radiación térmica. El descubrimiento abre la puerta al desarrollo de nuevas aplicaciones en nanociencia y nanotecnología.
Es más que el escenario pasivo de intercambio entre madre e hijo. Los científicos sospechan que algunas enfermedades en la edad adulta tienen su origen en ella. Ahora, EE UU ha anunciado que financiará con 41,5 millones de dólares el Proyecto Placenta Humana para monitorizarla en tiempo real e, incluso, desarrollar fármacos que acondicionen nuestro primer hogar.
Investigadores de la Universidad de Málaga, junto a colegas brasileños, han aplicado nanoesferas de calcio procedentes de corazas de crustáceos para propiciar la reacción química necesaria para obtener biodiésel. Se trata del primer estudio que utiliza este material barato y abundante en la naturaleza para fabricar el biocombustible.
Investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) han desarrollado un procedimiento de fabricación de nanosensores ópticos de aluminio sobre sustratos flexibles. El resultado tiene aplicación en dispositivos que se podrían llevar en la piel para, por ejemplo, monitorizar parámetros fisiológicos, o para fabricar etiquetas inteligentes.
Investigadores del Instituto Catalán de Nanociencia y Nanotecnologia (ICN2) han conseguido multiplicar por 250 la conductividad de un material cerámico, el iridato de estroncio, presionándolo con puntas nanométricas. El resultado supone un nuevo máximo en la literatura científica para este fenómeno llamado piezoresistividad, superando los valores de otros materiales utilizados en electrónica como los nanohilos de silicio o el grafeno.
Investigadores españoles han descubierto que si se intercalan átomos de plomo en una lámina de grafeno se genera un potente campo magnético por la interacción del giro o espín de los electrones con su movimiento orbital. Esta propiedad revolucionaria puede tener aplicaciones en espintrónica, una tecnología emergente promovida por la Unión Europea para crear avanzados sistemas de computación.
En el mar de grafeno (sobre un cristal de iridio) la interacción espín-órbita de los electrones es mucho menor que la que se crea al intercalar una isla de plomo. / IMDEA Nanociencia/UAM/ ICMM-CSIC/UPV-EHU
Un equipo de científicos de EE UU y de IMDEA Nanociencia, en Madrid, han descubierto un sistema para crear cristales metálicos con la forma que uno quiera. La técnica, que consiste en ‘nanomoldear’ el material con microexplosiones generadas con pulsos láser, podría ayudar al desarrollo de nuevos dispositivos electrónicos.
Investigadores de las universidades de Glasgow y Rovira i Virgili informan en la revista Nature cómo diseñar y fabricar dispositivos de memoria basados en moléculas de óxido y metal: los polioxometalatos. La nueva técnica permite reducir el tamaño de las celdas de datos y aumentar el almacenamiento de información, y se podría implementar en memorias flash a escala nanométrica.
Investigadores del Instituto de Ciencias Fotónicas (ICFO) han logrado fabricar resonadores mecánicos, basados en nanotubos de carbono, que consiguen los mayores factores de calidad conseguidos en nanotubos hasta la fecha. De esta forma se pueden medir vibraciones a escala nanométrica.