España ha anunciado los primeros casos detectados de ómicron. ¿Qué medidas habría que tomar para detener su expansión? ¿Es siquiera posible? Especialistas en epidemiología y salud pública coinciden en que las limitaciones a los vuelos no son la solución, y en que para reducir la transmisión es urgente ampliar la vacunación, no solo en los países ricos, sino en todo el planeta.
Varias expertas advierten de que la alta cobertura vacunal en España mitigará la nueva ola pero no la eliminará: aunque las vacunas previenen la enfermedad grave, no son un escudo infranqueable y deben ser complementadas con medidas de comportamiento.
Las vacunas contra la covid se han desarrollado con sorprendente eficacia y rapidez. Sin embargo, contra la próxima pandemia puede actuarse aún mejor. Varios proyectos están empezando a buscar una vacuna que sea eficaz contra todos o la mayoría de los coronavirus. Eso nos permitiría estar preparados frente a un virus aún por extenderse o incluso por aparecer.
En julio, el 70 % de los encuestados estaba de acuerdo en vacunarse cuanto antes. Según los resultados de finales de septiembre, sube el número de los que prefieren ponerse la segunda o la tercera vacuna disponible. La preocupación por la pandemia y por contraer la enfermedad desciende. El tamaño de la muestra es una de las principales limitaciones de este estudio.
El virólogo y médico del Cuerpo de Sanidad Nacional fue el artífice de la campaña de vacunación contra la polio en España y una figura clave en la investigación del VIH-sida. Este experto en investigación y gestión sanitaria es muy crítico con los anuncios de líderes como Trump y Putin que, con intenciones electoralistas, prometen una inmunización rápida, algo que por ahora no se ha conseguido.
Una veintena de especialistas en epidemiología y salud pública reclamaron en agosto que España llevara a cabo un examen de su respuesta ante la crisis sanitaria. Ahora, publican una segunda carta en The Lancet Public Health en la que ofrecen directrices para que la iniciativa tenga éxito. Consideran indispensable el apoyo y la implicación de los gobiernos central y regionales “en un país donde las tensiones políticas son altas”.
A pesar de que la población percibe que el uso del metro y el autobús conlleva un alto riesgo de contagio, las evidencias apuntan a que el peligro es bajo si se mantienen las medidas de higiene y salud. El uso de máscaras protectoras y la calidad del aire son esenciales junto con el distanciamiento físico, lo que plantea un reto: aumentar las frecuencias, sobre todo en horas punta.
Según los nuevos datos del estudio de la OMS que evalúa en España las actitudes ante la COVID-19, la preocupación se mantiene pero baja la percepción del riesgo: en julio, solo un 43 % la consideró como una enfermedad “grave o muy grave” frente al 83 % en mayo. Las medidas más populares frente a una segunda ola son prohibir los eventos de masas y confinar las provincias afectadas.
COSMO-Spain, un estudio de la Organización Mundial de la Salud, monitoriza con encuestas la percepción y el conocimiento de la población sobre la pandemia. Sus resultados ayudan a elaborar políticas públicas, conocer el grado de aceptación de las medidas contra la pandemia e identificar las necesidades de información en tiempo real.
En 1854, Londres sufrió su peor epidemia de cólera. En el libro El Mapa Fantasma se describe cómo el pionero de la anestesia, John Snow, a través de una pesquisa detectivesca en el barrio del Soho, confirmó la hipótesis de la transmisión de la enfermedad por vía acuática mediante un análisis visual de datos.