La olas de calor extremo, cada vez más tempranas e intensas, están entre las amenazas climáticas más letales. Se ha calculado que el verano pasado provocaron 60.000 muertes adicionales únicamente en Europa. La Organización Meteorológica Mundial vaticina que estos episodios seguirán aumentando, incluso durante la noche cuando implican más riesgos para la salud humana, afirman los expertos.
Este órgano colegiado intersectorial tiene como objetivo apoyar el análisis, diagnóstico, evaluación y seguimiento de los efectos de la emergencia climática en la salud, al tiempo que ofrece apoyo científico-técnico a las Administraciones públicas.
La investigadora y ecóloga francesa hace hincapié en la forma en la que tendemos a invisibilizar la huella digital. No se trata solo de reducir el streaming por los gases de efecto invernadero que este genera, sino de ser sobrios en el consumo y en tomar conciencia del daño que causamos a la salud de las personas y del planeta. Así lo sugiere en el documental Frankenstream. El monstruo que nos devora, que alerta sobre el impacto global de la industria de internet.
Un análisis epidemiológico liderado por el Instituto de Salud Global de Barcelona estima que murieron un 63 % más de mujeres que hombres por causas atribuibles a las altas temperaturas, con mayor incidencia en los países del Mediterráneo. La serie intensa de olas de calor arrojó valores que estuvieron por encima de la media durante todas las semanas del periodo estival, según el artículo publicado en Nature Medicine.
Entre los galardonados de este año, se encuentran los investigadores que han conseguido diseñar nuevas proteínas mediante inteligencia artificial, con el fin de crear terapias frente a múltiples enfermedades, y los descubridores de un ‘efecto invernadero’ de hace 56 millones de años que permite predecir el cambio climático actual.
Se trata de un pacto histórico que permitirá establecer un marco para la distribución justa de los beneficios derivados de los recursos genéticos marinos, así como la creación de áreas protegidas en zonas situadas fuera de las jurisdicciones nacionales. El titular de Naciones Unidas António Guterres celebró el acuerdo, que entrará en vigor tras su ratificación, y recordó que “las amenazas globales requieren una acción a escala mundial”.
Un grupo internacional de científicos revela que la redistribución humana del agua existente bajo la superficie terrestre está provocando que la Tierra se incline más de lo normal. Concretamente, los investigadores sostienen que nuestro planeta se ha desplazado casi 80 centímetros hacia el este en el periodo comprendido entre 1993 y 2010.
En los últimos decenios, el hielo ártico ha disminuido rápidamente en todas las estaciones, con un declive cada vez mayor desde el año 2000. Un equipo científico internacional estima que desaparecerá de forma temporal a finales de la época estival una década antes de lo previsto.
Un trabajo liderado por el Instituto Español de Oceanografía (IEO-CSIC) muestra que desde 1993 el nivel del mar sube 2,8 milímetros cada año. La mitad de ese ascenso se atribuye a la fusión de los hielos de Groenlandia y la Antártida.
En la lucha contra la crisis climática, los países históricamente responsables de las emisiones excesivas de dióxido de carbono deberían pagar unos seis billones de dólares cada año, hasta 2050, para indemnizar a otros estados vulnerables a un calentamiento global del que no son responsables. Así lo señala un trabajo internacional sobre compensaciones por apropiación atmosférica.