Un estudio coordinado por la Organización Mundial de la Salud revela que los pacientes que toman antirretrovirales tienen un 65% menos de riesgo de padecer tuberculosis, la principal causa de muerte de las personas con VIH. El efecto protector es independiente a la cifra del recuento de células CD4.
Las personas con VIH de países de ingresos bajos y medios que toman antirretrovirales son menos propensas a desarrollar tuberculosis que las que no los toman, según ha puesto de manifiesto un estudio liderado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en el que ha participado una investigadora del Centro Nacional de Epidemiología del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII),
Los resultados, que acaban de ser publicados en la revista Plos Medicine, son independientes de la cifra de recuento de células CD4 - medida clave para determinar la salud del sistema inmune- en las que inician el tratamiento.
La investigación analiza los resultados de 11 estudios relevantes realizados en el África Subsahariana, América del Sur, El Caribe y Asia y desvela que los participantes que tomaban antirretrovirales tuvieron una reducción en el riesgo de contraer tuberculosis de un 65% frente al grupo que no recibían terapia antirretroviral.
Este efecto protector se observa también en los adultos con recuentos de CD4 superiores a 350 células por mililitro de sangre. Los autores observaron que en ese caso el efecto la ingesta de terapia antirretroviral se asocia con una reducción del 57% en el riesgo de tuberculosis. En la actualidad, la OMS recomienda la terapia antirretroviral en adultos con recuentos inferiores a 350.
Cuanto más daño haya hecho el VIH, más bajo será el recuento de células CD4, que junto con la carga viral, se usa para estimar cuánto tiempo podrá mantenerse una persona sin que la enfermedad empiece a desarrollarse. El recuento de células CD4 también se utiliza para determinar cuándo iniciar tratamiento con medicamentos.
Según los autores, la revisión realizada demuestra que la terapia antirretroviral está fuertemente asociada a la importante reducción en la incidencia de tuberculosis en adultos con VIH en todos los recuentos de células CD4.
El hallazgo es fundamental para demostrar que la terapia antirretroviral tiene un impacto significativo en la prevención de la tuberculosis en adultos con recuentos de CD4 superiores a 350 y es compatible con estudios similares desarrollados en países desarrollados.
“Deberá considerarse por las autoridades, los investigadores y los profesionales sanitarios para sopesar los beneficios y riesgos de emplear antirretrovirales en personas con VIH superior a 350 células por mililitro”, afirman. “El empleo de antirretrovirales lo antes posible puede ser un componente clave en las estrategias nacionales e internacionales para controlar la tuberculosis asociada”, concluyen.
El riesgo de tuberculosis
Las personas con VIH son extremadamente susceptibles a la tuberculosis ya que el virus destruye las células del sistema inmunológico necesarias para luchar contra dicha infección.
Se estima que en 2010 se produjeron 1,1 millones de nuevos casos de tuberculosis entre los 34 millones de personas en el mundo que viven con VIH y que 350.000 personas murieron de tuberculosis asociada al VIH, lo que la convierte en la causa principal de muerte en las personas con el virus.
Referencia bibliográfica:
Suthar AB, Lawn SD, del Amo J, Getahun H, Dye C, et al. (2012) Antiretroviral Therapy for Prevention of Tuberculosis in Adults with HIV: A Systematic Review and Meta-Analysis. PLoS Med 9(7): e1001270. doi:10.1371/journal.pmed.1001270