La Guía de árboles y arbustos de Castilla y León se ha ampliado hasta las 400 páginas con nuevas especies, algunas desconocidas para la ciencia hasta hace escasas fechas, e información sobre los usos alternativos que se pueden dar a determinadas plantas. Algunas especies consideradas poco valiosas como las jaras se asocian a la proliferación de hongos comestibles de gran interés comercial, como los boletus o las trufas, de manera que su plantación “puede dar un valor añadido a suelos pocos productivos”.
La publicación, elaborada por Juan Andrés Oria, profesor del Campus de Palencia, recoge otros datos de interés como el papel que ejercen las plantas melíferas (aquellas que utilizan los apicultores para la producción de miel). Como indica el experto, no sólo son valiosas para las abejas sino que dependen de ellas muchas especies de insectos polinizadores.
“Estas plantas tienen un interés ecológico muy grande, hasta el punto de que promoviendo algunas de estas especies se favorece a la fauna de menor tamaño y al funcionamiento del ecosistema en general”, subraya. Entre ellas se encuentra la acacia que, pese a no ser autóctona, se incluye en la Guía por su valor ecológico. “Es una planta melífera extraordinaria que sirve de alimento a muchos insectos amenazados, por lo que tiene un valor elevado”, insiste.
La nueva edición, que surge tras una gran acogida de las dos primeras con la venta de 8.000 ejemplares, incorpora otros aspectos aplicados como puede ser la utilidad de determinadas especies en temas como la restauración ambiental o la jardinería, lo que supone “una alternativa para conservar especies que se encuentran amenazadas”.
Especies nuevas
En cuanto a la estructura del libro, Juan Andrés Oria señala que se estructura en dos bloques, uno referido a los árboles y otro a los arbustos y matorrales. Después, cada parte está organizada en torno a familias. Asimismo, se ha elaborado un mapa de distribución de las especies y se han incorporado algunas que han sido descritas por la ciencia en los últimos años como el Quercus orocantabrica, una especie de roble de alta montaña que fue descrito por científicos de la Universidad de León, entre otros, hace algunos años.
A juicio del experto, el interés de la población en general por el mundo de la naturaleza es creciente. En este sentido, la guía se dirige tanto a los ciudadanos con interés en conocer todas estas aplicaciones de las plantas como a las instituciones responsables del medio ambiente y a los centros educativos, a nivel regional y nacional.