La dolorosa incertidumbre de los refugiados, atrapados en los campos y acorralados en una espera eterna, no ha doblegado a los gobiernos anfitriones que son reticentes a que entren en sus sociedades. La ayuda humanitaria se ha convertido en una solución temporal a un problema permanente: la duración media de la estancia en un campamento es ahora de unos 17 años. Científicos de todo el mundo han detectado las debilidades de los sistemas de ayuda y ponen sus investigaciones a disposición de las pequeñas y grandes agencias para mejorar la coordinación del trabajo sobre el terreno.
Año tras año, millones de personas huyen de sus hogares por causas medioambientales. Los números no reflejan la devastación que sufre una población cuando tiene que abandonar su tierra. Por primera vez, un texto legal –el acuerdo de París que se espera aprobar mañana– plasma sobre el papel el drama de las personas desplazadas por el clima.
Icono pop de la ciencia, padre de la física moderna y ‘la persona del siglo’ según la revista Time. Son numerosos los clichés para referirse a Albert Einstein, pero pocos saben que un año después de abandonar su país a finales de 1932 impulsó en EEUU la creación de una rama de la Asociación Internacional de Socorro. Su motivación: apoyar a los europeos a escapar, como él, del nazismo.
Alrededor de medio millón de personas llegarán a la Unión Europea a lo largo de este año, procedentes de países en conflicto. Ante la actual presión migratoria, los estados europeos están adoptando políticas reactivas y no han sabido adoptar posiciones comunes suficientemente coherentes y con visión de futuro. Entre las diferentes medidas que urge tomar está afrontar las raíces del problema, consiguiendo acuerdos entre los estados que apoyan a las partes enfrentadas en los conflictos.
La revista The Lancet Oncology publica en su último número un estudio sobre el problema sanitario que supone el número de refugiados con cáncer en Jordania y Siria. La enfermedad está creciendo entre los refugiados de países en desarrollo, donde tradicionalmente se ha prestado más atención a las enfermedades infecciosas y la malnutrición.
Entre 2008 y 2012, 144 millones de personas se vieron obligadas a abandonar sus hogares por los desastres repentinos ocurridos en todo el mundo a causa del cambio climático. Un informe de la Universidad de las Naciones Unidas y el Consejo Noruego para Refugiados pide mayor atención a la situación de estas personas desplazadas.
El último informe del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC) asegura que los desastres naturales, como los tifones, serán cada vez más frecuentes y extremos si las condiciones atmosféricas continúan cambiando. El tifón Yolanda es una de las múltiples llamadas de atención que el clima ha dado este 2013 al ser humano. Recogemos 20 de los eventos más extremos de este año.