El estudio, realizado con la técnica de edición genética CRISPR, subraya el papel fundamental de la síntesis de la molécula GPI en las primeras fases de la formación de este órgano y abre nuevas vías para comprender a escala molecular la preeclampsia, una de las complicaciones más peligrosas del embarazo.
Investigadores de los hospitales Sant Joan de Déu y el Clínic en Barcelona han desarrollado un prototipo de placenta con la que un modelo animal ha permanecido más de una semana en buenas condiciones fetales. El objetivo es aumentar la supervivencia de los prematuros extremos, nacidos con son seis meses o menos.
Científicos del Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudios del Agua (CSIC) han encontrado once nuevos compuestos químicos, como filtros ultravioleta de cremas solares y parabenos, en muestras de cordón umbilical tomadas a recién nacidos. Los investigadores advierten de sus posibles efectos negativos y de la necesidad de un mayor seguimiento y regulación.
Científicos de Cambridge han identificado una señal clave que el feto utiliza para controlar su suministro de nutrientes desde la placenta, lo que revela un tira y afloja entre los genes heredados del padre y de la madre. El estudio, realizado en ratones, podría explicar por qué algunos bebés no se desarrollan correctamente en el útero.
El gen GPR126 es clave para la correcta formación de la placenta en ratones. Además, puede desempeñar un papel similar en el desarrollo de este órgano transitorio en humanos, ya que se ha observado que los hijos de las mujeres portadoras de mutaciones en GPR126 fallecían durante su gestación o al poco de nacer.
La afectación placentaria, causada por la infección del SARS-CoV-2, produce un comportamiento anómalo del flujo sanguíneo entre la madre y el bebé en desarrollo, debido a la necrosis del trofoblasto. Investigadores españoles han observado que, a pesar de que resulta muy infrecuente, puede ser mortal para el feto.
Un nuevo estudio, publicado en Nature Communications, revela la posible transmisión del coronavirus a través de la placenta de una mujer, que dio positivo en las pruebas de COVID-19, al feto. Hasta ahora no se había confirmado ningún caso de este tipo de contagio.
Científicos belgas han encontrado partículas de carbono negro en el lado fetal de la placenta de 28 mujeres embarazadas expuestas a contaminación atmosférica. El hallazgonecesita investigación adicional para determinar si estas partículas son capaces de llegar al feto.
Por primera vez un estudio revela el rol fundamental del gen TLK2 en el desarrollo embrionario de ratones. A pesar de las diferencias en esta etapa entre roedores y humanos, este hallazgo podría tener relevancia biomédica. Los resultados se publican hoy en Cell Death and Differentiation.
Investigadores del Hospital Pediátrico de Filadelfia, en EE UU, han desarrollado un dispositivo que simula el útero materno y tiene líquido amniótico producido en laboratorio. Aunque de momento se ha probado solo con animales, el objetivo es reducir la mortalidad en bebés extremadamente prematuros.