El ozono (O3) es vital para la vida en la tierra. Pero este compuesto, que desde la estratosfera protege la vida de los rayos ultravioleta, es tan vulnerable como agresivo, y puede ser letal para los organismos si alcanza ciertos niveles en la capa más baja de la atmósfera. Precisamente, la peligrosidad que le confiere su alta capacidad de oxidación es también su principal ventaja: el ozono elimina bacterias, hongos y malos olores. Investigadores de la Universidad de Oviedo están probando un nuevo sistema para producirlo en mayores cantidades de las que se consiguen con la tecnología vigente.
Segundo prototipo de generador de ozono de alto rendimiento que desarrollan los investigadores de la Universidad de Oviedo, en la Escuela Politécnica Superior de Ingeniería de Gijón / Foto: FICYT
José Marcos Alonso Álvarez, en su despacho de la Escuela Politécnica Superior de Ingeniería de Gijón / Foto: FICYT
El tráfico rodado es, con diferencia, el sector de transporte que contribuye en mayor medida al calentamiento global. El transporte aéreo va en segunda, mientras que el transporte marítimo tiene un efecto de enfriamiento neto sobre el clima de la Tierra, según un estudio publicado recientemente.