Una invención para combatir el calor, el aire acondicionado
Unas extrañas estructuras poligonales del cráter Gale, en Marte, podrían haberse formado por procesos de contracción termal, asociados a un clima frío en el pasado del planeta. Así lo revela un estudio en el que participan investigadores del Instituto de Geociencias (Universidad Complutense de Madrid-CSIC). Otro trabajo concluye que algunas de las rocas del mismo cráter, fotografiadas por el robot Curiosity, son sedimentarias.
Las larvas de la rana verde centroeuropea (Pelophylax lessonae) tienen una asombrosa capacidad para crecer a diferente ritmo en función de los cambios en la temperatura. Según un nuevo estudio, esta especie, que necesita ambientes relativamente cálidos para reproducirse, acelera su capacidad de crecimiento en Suecia en la época más cálida para aprovechar al máximo los escasos periodos de altas temperatura. Este aspecto puede ser la clave de su supervivencia en climas fríos.
10 de Agosto 2010: la Antártida registra la temperatura más baja de la historia, -93,2 ºC
Con una bombona de butano y un viejo aire acondicionado, Antonio Trescastro construyó su primera liofilizadora. Eso fue hace 18 años. Hoy este autodidacta compagina su trabajo de técnico de mantenimiento del CSIC en la Estación Experimental del Zaidín en Granada con la divulgación de la ciencia, y dedica su tiempo libre a mejorar su museo, único en el mundo, de setas liofilizadas gracias a una técnica de deshidratación por frío. También ha desecado frutas y verduras, insectos, crustáceos e incluso el corazón de un cerdo.
Los pingüinos solo son capaces de distinguir dos de los cinco sabores: agrio y salado. Según investigadores de la Universidad de Michigan (EE UU) esto puede deberse al frío extremo de la Antártida, pero lo que aún no tienen claro es si la morfología rugosa de la lengua de los animales y su costumbre de tragar los alimentos enteros es causa o consecuencia de esta pérdida.
El dispositivo podría utilizarse en invierno en los Pirineos / Fidelmendia (CC BY-NC 2.0).
En zonas con inviernos largos y fríos, donde existe una demanda energética estable, podría utilizarse una microturbina que produce energía eléctrica y térmica a partir de renovables. Investigadores de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) y del CIEMAT han demostrado su elevado rendimiento energético, superior al de las calderas convencionales.
Los captadores solares ordinarios están habitualmente concebidos para producir sólamente agua caliente. Un nuevo sistema, patentado por investigadores del Departamento de Física de la Universidad de Burgos (UBU), es capaz de calentar agua mediante un colector, pero también de enfriarla mediante un lecho “adsorbente” y condensador y un evaporador.
Recreación artística de un rinoceronte lanudo. Imagen: Judy Naylor.