Las marcas de corte más antiguas de Europa sobre restos de Mamuthus meridionalis, hallados en el yacimiento Fuente Nueva 3 en Orce (Granada), confirman que los humanos comieron su carne. En la investigación, liderada por las universidades Complutense de Madrid y Granada, también aparecen marcas de dientes que apuntan a tigres dientes de sable.
Unos turistas interactúan con un elefante asiático en el Karen Elephant Sanctuary en Chiangmai (Tailandia). En este centro no está permitido subir sobre los animales. / Ángel Montesinos
Una investigación internacional, en la que participan la Universidad de Granada y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas, relaciona la desaparición de especies como la gacela común o el elefante africano con el crecimiento de los enfrentamientos armados en el Sáhara y el Sahel. Los científicos reclaman la integración del factor medioambiental en las estrategias de paz que pretenden terminar con los conflictos.
El elefante africano de bosque (Loxodonta cyclotis), que habita una zona considerada un santuario en el país centroafricano de Gabón –el Parque Nacional Minkébé–, está acosado por los cazadores furtivos del país fronterizo Camerún. Más del 80% ha desaparecido en la última década debido a esta práctica ilegal, según informa un estudio de la revista Current Biology.
Un estudio científico recoge todos los datos de las excavaciones realizadas en el yacimiento de Ambrona, en la provincia de Soria, durante sus 100 años de historia. El trabajo, publicado en PLoS ONE, ha permitido identificar las principales concentraciones de megafauna (como los elefantes) en los diferentes niveles estratigráficos y explicar su naturaleza.
La población de elefantes está disminuyendo a un ritmo del 2% cada año en África a causa de la caza furtiva. / Miquel García
Los elefantes del Parque Nacional Amboseli (Kenia, África) diferencian a sus enemigos por la voz. Estos animales reconocen a los varones de la tribu masái –su principal amenaza humana en esta región– y responden ante ellos con un comportamiento defensivo, incluso aunque se hagan pasar por mujeres.
Los elefantes viven muchos años no sólo porque su tamaño les protege de los depredadores, sino porque su gran cerebro (relativo al tamaño de su cuerpo) les permite encontrar alimentos cuando llega la estación seca.