En España, siete de cada diez familias desperdician comida de manera habitual, en especial las que tienen hijos. Un estudio relaciona este grave problema social con las características socioeconómicas de la unidad familiar.
Más de 30 000 nidos de 176 especies de aves de todo el planeta contienen residuos antrópicos, según ha identificado un estudio liderado por la Universidad de Granada. El trabajo trata de analizar las causas de este fenómeno, entre las que se encuentra la posibilidad de que utilicen materiales no naturales para alardear de su capacidad reproductiva.
Un estudio realizado por un equipo de científicos de más de una decena de centros de investigación españoles ha encontrado microplásticos en el agua de grifo, en localidades de Galicia, Madrid, Murcia, Cataluña y las islas Canarias. Aunque por ahora el riesgo para la salud humana parece insignificante, los resultados subrayan la importancia de una gestión adecuada de los residuos.
En un mundo condicionado por la comida, la valorización de los desechos industriales podría ser otro incentivo de rentabilidad para los productores de alimentos. Investigadores estadounidenses evalúan cómo mejorar la seguridad energética y reducir el impacto ambiental, dándole una segunda vida a la basura orgánica.
El equipo de las universidades Politécnica de Madrid y de Castilla-La Mancha indica en un estudio que este biocombustible emite un 55 % menos de hollín, lo que supondría “un prometedor avance en la reducción de emisiones tanto en aviación como en automoción”.
Científica de exploración oceánica, divulgadora y emprendedora, la estadounidense Rachael Miller ha creado Cora Ball, un dispositivo que permite filtrar los microplásticos que desprende la ropa al ser lavada. En una visita a Barcelona, habló sobre el riesgo que supone el vertido de estos residuos en las aguas urbanas, que acaban yendo a parar al mar y son ingeridos por las especies que lo habitan.
Los supervivientes de las catástrofes naturales, cada vez más frecuentes por el calentamiento global, algún día podrían aprovechar los escombros y desechos que quedan. Peter Godart ha ideado un sistema para transformar la chatarra de aluminio en hidrógeno y así generar electricidad.
Investigadores del instituto IFISC han identificado 28 países que corren un alto riesgo de congestión de residuos, con el consiguiente riesgo para la salud y el medio ambiente. Entre ellos se encuentran México, India y Uzbekistán, que importan grandes volúmenes de los considerados peligrosos. China, Mozambique, Senegal y Afganistán son los que presentan mayor contaminación química producida por las basuras.
La pandemia ha provocado un gran aumento de residuos sanitarios y ha agravado su impacto medioambiental. Un trabajo de la Organización Mundial de la Salud, que ha cuantificado los desechos adicionales generados por la crisis, resalta las deficiencias de los sistemas actuales de gestión de desechos sanitarios, y propone soluciones para este grave problema ambiental.
La covid-19 ha traído problemas que van más allá de la salud humana. Con la necesidad del uso de equipos de protección, test y embalajes de compras online, se ha producido un aumento de la demanda de plásticos de un solo uso, que ha intensificado la presión sobre un problema de residuos mundial ya descontrolado.