La empresa Repsol ha anunciado hoy que el análisis de las muestras obtenidas en el sondeo exploratorio de petróleo y gas en aguas de Canarias, denominado Sandía, no tienen ni la calidad suficiente ni el volumen para considerar una futura extracción.
Rowan Renaissance, el buque que la empresa utiliza para las prospecciones en busca de petróleo en Sandía, en aguas próximas a Canarias. / EFE.
Desde hace varios meses, Gobierno, compañías petrolíferas, organizaciones sociales y la propia población están inmersos en un debate a favor o en contra de las prospecciones de petróleo frente a las costas canarias. A pesar de la oposición, los geólogos coinciden –debate aparte– en la riqueza en recursos minerales energéticos del fondo marino entre Canarias y África. Pero, ¿qué hay ahí abajo que suscita tanto interés?
El secreto del éxito de Repsol en el hallazgo de nuevos yacimientos en el mundo está muy relacionado con su proyecto Caleidoscopio y la alianza con el Barcelona Supercomputing Center. Este centro ha sido el encargado de desarrollar los algoritmos de generación de imágenes del subsuelo que han permitido al grupo español localizar hidrocarburos en estructuras geológicas tan complejas como el yacimiento subsalino de la cuenca de Campos, en aguas profundas a 200 kilómetros del litoral brasileño.
Modelo sísmico logrado con la aplicación de algoritmos de generación de imágenes del subsuelo. / Repsol
Plataforma de Repsol en cuenca de Santos (Brasil). / Repsol