La plataforma flotante Cidade de São Paulo, anclada a una profundidad de 2.140 metros, a 310 km de la costa de São Paulo, Brasil. Tiene capacidad para procesar diariamente 120.000 barriles de petróleo y cinco millones de metros cúbicos de gas.
La tecnología aplicada por Repsol ha ayudado a la compañía a descubrir nuevos yacimientos en Brasil y en Golfo de México estadounidense, zonas en las que opera en consorcio con empresas energéticas locales.
Con las herramientas desarrolladas, en colaboración con el BSC, "se cuantifican mejor los riesgos y se ahorra en pozos infructuosos", según Repsol.