¿Cuántas personas forman una minoría? ¿Tres millones? Esa es la cifra de pacientes que sufren enfermedades raras en España. Con motivo el próximo 28 de febrero del Día Mundial de estas patologías, enfermos y familiares explican a SINC su día a día. Su objetivo: que se agilicen los trámites burocráticos y que los investigadores y la sociedad no les olviden.
Investigadores del Centro de Regulación Genómica en colaboración con el Cold Spring Harbor Laboratory, identifican el gen p63 como oncogén que causa carcinoma escamoso y muestran cómo promueve la supervivencia de las células madre durante el desarrollo del tumor. El trabajo, publicado en la revista Cell Stem Cell, presenta estos resultados el día 4 de febrero, Día Mundial del Cáncer.
La revista Nature Genetics dedica esta semana su edición a la psoriasis, una patología cutánea crónica y recurrente, y una de las enfermedades autoinmunes con mayor prevalencia mundial (del 2 - 3%). Cinco artículos, uno de ellos con participación de investigadores del Centro de Regulación Genómica (CRG) y del Hospital del Mar de Barcelona, describen las variantes genéticas asociadas a una mayor susceptibilidad.
Ilustración de una "e-piel" con un circuito de nanocables cubriendo una mano. Un objeto tan frágil como un huevo se puede mantener, lo que demuestra la funcionalidad del dispositivo de la piel artificial para aplicaciones en robótica y prótesis.
El calor tan sólo es una consecuencia que se suma a otros tantos efectos positivos y negativos que el sol puede causar en las personas, en su estado de ánimo, en su sistema inmune y, cómo no, en nuestro mayor órgano: la piel. Una nueva investigación, realizada por investigadores de la Universidad de Málaga (UMA), muestra que la obsesión por un bonito bronceado es uno de los principales puntos débiles de la concienciación ciudadana sobre el sol.
Un gen suicida, denominado 'gen E', procedente de colífagos, es capaz de inducir muerte en las células en las que se expresa. Científicos de la Universidad de Granada (UGR) han demostrado la eficacia de este sistema no sólo in vitro (utilizando cultivos de células tumorales), sino también in vivo, mediante el uso de animales de experimentación en los que fueron inducidos este tipo de tumores.
Los hallazgos de estos estudios, publicados hoy en la revista Nature, muestran una visión única de la lucha entre los mecanismos de mutación y reparación del ADN que suceden cuando la enfermedad progresa. Los investigadores confirman cómo el medio ambiente influye en la progresión del cáncer, y señalan las posibles vías de reparación que intentan limitar el daño.