El proyecto estudiará la respuesta celular a estímulos mecánicos para tratar lesiones y los procesos regenerativos del propio cuerpo a través de la modulación de los fibroblastos.
Investigadores de EE UU han desarrollado una nueva nanoestructura con propiedades piezoeléctricas. Con ella han conseguido hacer crecer un cartílago robusto y funcional en la articulación de la rodilla de un conejo.
Dos grupos independientes de científicos, con participación de la Universidad Politécnica de Valencia en ambos, han diseñado nanoantenas capaces de detectar la luz infrarroja invisible y convertirla en visible. El avance abre la puerta a nuevos sistemas de vigilancia ambiental y observación del universo.
El rendimiento de las pilas de combustible fabricadas con la bacteria Shewanella aumenta considerablemente cuando se recubren sus membranas con nanopartículas de plata, lo que potencia la transferencia de electrones hacia electrodos de grafeno. Investigadores de la Universidad de California (EE UU) acaban de presentar el avance.
Científicos de la Universidad de Oviedo, el Donostia International Physics Center y otros centros internacionales han conseguido guiar la luz a lo largo de direcciones por las que hasta ahora no se podía en un material de espesor nanométrico. El avance se podría aplicar en procesamiento de información, telecomunicaciones y sensores.
Científicos de Israel, España y otros países han fabricado un dispositivo capaz de medir la corriente eléctrica a través del ADN, lo que ha permitido descubrir cómo la conduce a grandes distancias. El hallazgo abre la puerta a una nueva generación de nanodispositivos electrónicos basados en ADN.
Investigadores del centro vasco CIC biomaGUNE han logrado depositar átomos de oro sobre nanocilindros también de oro, dando como resultado una estructura casi helicoidal con propiedades quirales. Esto le confiere capacidad para interactuar con un tipo de luz polarizada, una técnica que podría tener aplicaciones en óptica, catálisis, detección biológica e imagen biomédica.
Científicos chinos han demostrado que nanopartículas con forma de cubo se pueden unir a las mitocondrias de las células cancerosas para destruirlas con la ayuda de campos magnéticos. En este estudio in vitro participa un investigador de la Universidad Politécnica de Madrid.
Científicos de la Universidad de Oviedo y el Centro de Investigación en Nanomateriales y Nanotecnología han descubierto un método para controlar la frecuencia de la luz en la nanoescala intercalando átomos de sodio en los llamados materiales de van der Waals. El avance se podría aplicar en tecnologías de la información y sensores biológicos de alta sensibilidad.