Una nueva investigación de paleontólogos de la Fundación Dinópolis analiza la variabilidad de las huellas de los grandes dinosaurios ornitópodos que vivieron en esta provincia aragonesa hace unos 125 millones de años.
En este trabajo, con participación del CENIEH, se ha analizado una estalagmita con restos de hollín y pigmentos, lo que confirma la presencia de actividad humana en esta cavidad situada al sureste de Francia.
En el mundo están registradas unas pocas decenas de yacimientos de icnitas —huellas en sedimentos o rocas— que demuestran la capacidad nadadora de estos animales. En este caso se trata de restos que se corresponden probablemente a espinosáuridos al intentar superar masas de agua.
El nuevo trabajo corrobora los resultados de un controvertido estudio de 2021, en el que se indicaba que los humanos ya habitaban el sur de Norteamérica durante el Último Máximo Glacial, milenios antes de lo que se creía.
Este rastro fósil, descubierto en 1978, constituye un impresionante registro de australopitecos caminando sobre cenizas volcánicas mojadas por la lluvia hace casi tres millones setecientos mil años. El nuevo análisis permite conocer mejor a este género extinto de primate.
Un estudio liderado por investigadores de la Universidad de La Rioja ha descubierto que ciertas especies de terópodos podían correr a una velocidad de 45 kilómetros por hora. El análisis de las huellas fosilizadas de estos dinosaurios carnívoros bípedos también ha permitido confirmar su agilidad.
Estas pisadas fosilizadas halladas en el yacimiento a de Laetoli en Tanzania en la década de 1970 no son de osos, sino de humanos primitivos. Así lo confirma un nuevo estudio que presenta pruebas concluyentes de que múltiples especies de homínidos coexistieron en esa región y que el desconocido dueño de las huellas caminaba erguido.
En tres municipios de la provincia de Valencia han aparecido 46 huellas de tortugas que datan del Triásico superior, es decir de hace 227 millones de años. Según el estudio, liderado por investigadores de las universidades de Jaén y Valencia, se trata de uno de los registros más antiguos de estos vertebrados a escala mundial y amplía el conocimiento sobre su evolución y diversificación en relación con el medio acuático.
Más de 300 huellas tridáctilas de dinosaurios han sido analizadas en un yacimiento suizo antes de ser destruidas por la construcción de una autopista. El equipo internacional de paleontólogos, liderado por el Instituto Catalán de Paleontología Miquel Crusafont, confirma el hallazgo de una nueva icnoespecie (especie de huellas fósiles) de dinosaurio carnívoro que pudo medir entre siete y diez metros. El estudio completa otro trabajo que describe una de las huellas de dinosaurio carnívoro más grande del mundo, de 77 cm de longitud.
Científicos españoles han descrito un gran conjunto de huellas de reptiles que posteriormente dieron lugar a los cocodrilos y a los dinosaurios, conocidos como arcosauromorfos. Entre ellas destaca las de una nueva especie, Prorotodactylus mesaxonichnus, correspondiente a un reptil que vivió en el Pirineo hace entre 248 y 247 millones de años, pero que no estaría emparentado con los dinosaurios.