Las noches estivales invitan a buscar cielos oscuros y dirigir nuestra mirada hacia las estrellas y los planetas. En 2021 se podrá observar a simple vista a Júpiter, Saturno, Venus, Marte e incluso Mercurio si el horizonte está despejado, y la lluvia de las perseidas se verá especialmente bien. La Luna, las constelaciones y la franja blanquecina de nuestra Vía Láctea completarán el espectáculo astronómico.
Investigadores del Instituto de Astrofísica de Andalucía (CSIC) han liderado un proyecto internacional de observación en radio del sistema planetario más cercano a la Tierra. Los resultados confirman que los planetas extrasolares pueden detectarse con radiotelescopios.
Astrónomos de la Universidad de Arizona han encontrado un cuásar a una distancia récord: unos 13.030 millones de años-luz de la Tierra. Se formó solo 670 millones de años después del Big Bang y alberga un desafiante agujero negro supermasivo con una masa equivalente a 1.600 millones de soles.
La lejana galaxia ID2299 está expulsando casi la mitad del gas que usa para formar estrellas a un ritmo sorprendente: unas 10.000 masas solares al año, según las observaciones del telescopio ALMA en Chile. Los astrónomos piensan que este espectacular evento lo desencadenó una colisión con otra galaxia, lo que hace replantear cómo estas dejan de formar estrellas y de dónde se emite el combustible para producir otras nuevas.
En cuestión de 20 años la nebulosa de la Mantarraya ha perdido brillo y cambiado de forma, según las observaciones del telescopio espacial Hubble. Los bruscos cambios de temperatura sufridos por su estrella central parecen estar detrás de este inédito y rápido deterioro.
La Agencia Espacial Europea ha lanzado la tercera entrega de datos de la misión Gaia, con información sobre más de 1.800 millones de objetos del universo. El movimiento de estrellas hacia el anticentro de nuestra galaxia, situado en la dirección opuesta al centro, ha permitido indagar en el pasado de la Vía Láctea y su roce con la vecina Sagitario.
El experimento internacional Borexino, en el que participan investigadores de la Universidad Autónoma de Madrid, ha detectado neutrinos producidos en el Sol mediante un ciclo de fusión de hidrógeno canalizado por carbono, nitrógeno y oxígeno. Este ciclo es el que predomina en la multitud de estrellas masivas que brillan en el universo.
Con la ayuda de un radiotelescopio de la India, un equipo de astrónomos ha detectado por primera vez emisiones de hidrógeno atómico en galaxias que se crearon hace 8 millones de años, cerca del momento álgido en el ‘ensamblaje’ de este tipo de objetos. El hallazgo ayuda a entender por qué luego se redujo tanto la formación de estrellas, que usan ese hidrógeno, cada vez más escaso, como combustible.
La aparición en Venus de esta molécula asociada a la vida en la Tierra, también llamada fosfina, ha causado un gran revuelo científico y mediático, pero hace décadas que se conoce su presencia en las atmósferas de Júpiter y Saturno, e incluso se ha encontrado en algunas estrellas. Investigadores del CSIC fueron los primeros en detectarla fuera de nuestro sistema solar. Ahora valoran para SINC el nuevo descubrimiento.
Esta investigadora de la UIB, jefa del Grupo de Física Gravitacional, ha participado en la detección del agujero negro más masivo jamás observado hasta ahora, un hallazgo que obligará a revisar la teoría de cómo evolucionan y mueren las estrellas.