En Navidad, la mesa se llena de productos distintos a los del resto del año, pero no todos pueden disfrutar de ellos. Los celíacos deben respetar la dieta sin gluten aunque cada vez disponen de más opciones donde elegir. Los científicos y las empresas alimenticias investigan y tratan de encontrar una solución eficaz para la salud y el bolsillo de los que padecen celiaquía.
La Universidad de Murcia (UMU) ha colaborado en un estudio que identifica dos patrones dietarios en las personas, "prudente" o "mediterráneo" y "occidental". La dieta "occidental" se caracteriza por el consumo elevado de carne roja, carne procesada, pizza, snacks, dulces y bebidas energéticas, mientras que la dieta "prudente" lo hace por el consumo elevado de pescado, fruta, verduras, legumbres y cereales integrales. La ingesta de esta última se asocia positivamente en los hombres con el porcentaje de espermatozoides móviles.
La enfermedad celíaca es una intolerancia permanente al gluten, una proteína que se encuentra en el trigo, la cebada, el centeno, la avena y el triticale. Es la enfermedad crónica intestinal más frecuente en España, responsable de una atrofia de las vellosidades del intestino que conlleva una mala absorción de los nutrientes. En la actualidad, el único tratamiento existente para mantener controlada la enfermedad celiaca es seguir de manera estricta y de por vida una dieta sin gluten. No obstante, la comunidad científica busca nuevas terapias que posibiliten a los pacientes digerir esta proteína. Investigadores de la Universidad de Valladolid trabajan en esta línea.
Una dieta sana y el ejercicio adecuado desempeñan un papel clave en el tratamiento y prevención de la obesidad, sin embargo, aún se conoce poco sobre la relación que existe entre ambos factores. Ahora, un nuevo estudio revela que el aumento en los niveles de actividad física se asocia con una mejoría en la calidad de la dieta.
La investigación ha puesto de manifiesto la escasa cultura acerca de este ingrediente básico de la dieta mediterránea. Imagen: El Aderezo
Una investigación del Instituto Catalán de Paleoecología Humana y Evolución Social (IPHES) asegura que las tortugas formaban parte del menú de las primeras poblaciones humanas de Europa, hace alrededor de 1,2 millones de años. El estudio, que publica el Journal of Human Evolution, se basa en el análisis de 75 restos fósiles de tortugas encontrados en la Sima del elefante en Atapuerca (Burgos).
Aunque en la última década se ha estabilizado el exceso de peso en las niñas y los niños españoles (de entre 6 y 9 años), éste afecta al 45,2% de la población infantil. Así lo revela el estudio ALADINO, realizado por la Agencia de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) y que ha presentado este jueves la ministra de Sanidad, Política Social e Igualdad, Leire Pajín.