Elegir alimentos con criterio de sostenibilidad es bueno para la salud humana y para el planeta. Así lo propone la nueva guía saludable de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición, que también promueve la actividad física de todas las personas.
Las personas que siguen una alimentación mediterránea tienen un acortamiento más lento de los telómeros, unas secuencias de ADN relacionadas con la esperanza de vida. Este trabajo supone el análisis más amplio realizado hasta ahora que muestra una asociación beneficiosa entre ambos parámetros.
El tratamiento del exceso de peso constituye un reto tanto para las autoridades sanitarias como para los profesionales de la salud. Un nuevo estudio muestra que si los beneficios de estas terapias pueden extenderse a las personas más cercanas al paciente, esto supondría una optimización de los costes y del esfuerzo del equipo sanitario asistencial.
Un equipo internacional de expertos ha descrito por primera vez los metabolitos que advierten de la aparición de infarto de miocardio e ictus en la población de España y EE UU. El conocimiento adquirido podrá ser útil en el futuro para individualizar mejor la dieta ideal para la prevención de la enfermedad cardiovascular.
La eficacia de la dieta mediterránea depende del perfil genético de cada persona. Un nuevo estudio ha comprobado cómo cada individuo se beneficia de forma diferente de la ingesta de la misma cantidad de un antioxidante natural, el tirosol. Esto abre la puerta a una personalización de las cantidades recomendadas de consumo.
Un nuevo estudio confirma cómo el patrón de consumo actual en España contiene tres veces más carne, productos lácteos y azúcar, y un tercio menos de frutas, verduras y cereales. Los resultados revelan que la vuelta a la dieta mediterránea produciría, además de beneficios nutricionales, significativos ahorros de agua.
Un nuevo estudio demuestra que el aceite de oliva virgen extra facilita la absorción y la bioactividad de las hortalizas. Este hallazgo permite profundizar en los mecanismos por los que la gastronomía podría tener un papel relevante en los efectos saludables de la dieta mediterránea.
Un nuevo estudio en 20.000 voluntarios revela que consumir más de cuatro porciones diarias de alimentos ultraprocesados se relaciona con un 62 % demayor riesgo para todas las causas de mortalidad. La investigación acaba de publicarse en la revista British Medical Journal.
Un estudio asocia por primera vez una dieta rica en frutos secos durante el primer trimestre de embarazo con una mejor función cognitiva, capacidad de atención y memoria de trabajo a largo plazo en los futuros hijos. Los autores consideran que conviene tomar los resultados con cautela y tratar de reproducirlos en el futuro.
Investigadores españoles han encontrado que aquellas personas con una mayor adherencia a la dieta mediterránea presentan mayores niveles de bienestar psicológico. El estudio, que cuenta con participantes de todo el territorio español, se publica en la revista Psychology and Health.