El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) ha presentado en la Cumbre de Biodiversidad que se celebra hasta el 29 de octubre en Nagoya (Japón) el informe de Economía de los Ecosistemas y Biodiversidad (TEEB, por sus siglas en inglés). Según el trabajo que ha evaluado el valor económico de los bosques, el agua dulce, los suelos y los arrecifes de coral, y los costes sociales y económicos de su pérdida, la riqueza natural del mundo tiene una importancia económica que debe estar en el punto de mira político.
Más de 175 países se han reunido en la tercera ronda de negociaciones de la ONU sobre cambio climático en Bonn (Alemania) para dar el siguiente paso hacia la Cumbre del Clima en Cancún (México) que se celebrará a finales de noviembre. La reunión de las Partes de Naciones Unidas para el Cambio Climático pretende acordar una solución global a largo plazo al reto climático, pero las opciones de acción no se definen todavía.
La Comisión Europea (CE) inauguró ayer el Año Internacional de la Biodiversidad con un documento que propone cuatro medidas para detener la pérdida de diversidad biológica. El objetivo de la Unión Europea (UE) es desarrollar antes de finales de año un marco político para la biodiversidad, ya que según la popia UE "la extinción de especies registra índices alarmantes". El primer paso será la conferencia europea de alto nivel Meta y visión post-2010 en materia de biodiversidad, que se celebra en Madrid los próximos 26 y 27 de enero.
Stewart Maginnis en el Bella Center de la Cumbre de Copenhague.
Todas las esperanzas de científicos, organizaciones sociales, y políticos estaban puestas en el interminable final de la XV Conferencia de Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP-15). Pero el acuerdo de Copenhague, tal y como se esperaba, no ha sido posible. A pesar de ser un progreso por la casi unánime aceptación del acuerdo entre países, el documento no satisface ni a la Unión Europea, más ambiciosa con sus objetivos globales de reducción de emisiones de CO2. Los científicos deberán ser más firmes en expresar que el cambio climático es, sin duda, una realidad.
A falta de la ratificación del Acuerdo de Copenhague a lo largo de la noche en el plenario de la Cumbre del Clima, la Unión Europea (UE) ya ha confirmado la existencia de un documento final, pero no es tan perfecto ni tan ambicioso como esperaba. Sin embargo, la UE ha señalado que “este acuerdo es mejor que no tener acuerdo”. Además de no ser vinculante, el acuerdo no tratará el tema de las emisiones hasta principios de año, y posiblemente se alargue hasta la próxima cumbre en México a finales de 2010. Por ahora, la aprobación de este texto no es unánime.
Mientras algunos líderes mundiales siguen debatiendo y buscando un equilibrio entre países industrializados y emergentes que en definitiva salve el Planeta, Barack Obama, presidente de EE UU, ya ha anunciado, antes de despedirse de la cumbre, que por primera vez los países emergentes se comprometen a reducir emisiones. Sin embargo, el acuerdo del que habla Obama no es legalmente vinculante.
Ambiente de la cumbre.