Dos estudios españoles publicados esta semana en la revista Cell describen la senescencia como un proceso normal durante el desarrollo embrionario. Ambos estudios atribuyen un rol completamente nuevo e inesperado a este proceso, a menudo relacionado con el envejecimiento y el cáncer.
Científicos granadinos han demostrado que la detección de células tumorales circulantes en sangre es una técnica que permite pronosticar la respuesta que los pacientes con un cáncer avanzado tendrán a la quimioterapia, e incluso los efectos secundarios asociados que padecerán.
Un estudio internacional liderado por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas ha descubierto que un polisacárido de la pared celular de los hongos, un glucano, regula la posición, la estabilidad y la función del anillo contráctil que participa en la división celular.
Un kit predice con mayor probabilidad que los métodos clínicos existentes la supervivencia al cáncer de pulmón más frecuente, el adenocarcinoma. Los autores han patentado recientemente este hallazgo.
Las proteínas Pds5 modulan el comportamiento de las cohesinas, complejos de proteínas que unen las dos copias de cada cromosoma para asegurar la correcta división de las células y evitar aberraciones. Los expertos subrayan que al entender su papel se podrá mejorar el diagnóstico y tratamiento de algunos pacientes con cáncer o síndrome de Cornelia de Lange.
La Agencia Internacional para la Investigación sobre el Cáncer ha anunciado hoy que ha clasificado la contaminación del aire como carcinógeno para los humanos, subiendo en su escala estándar hasta el grupo 1. Los resultados serán publicados en la revista The Lancet Oncology el próximo 24 de octubre.
Investigadores internacionales han demostrado que una combinación de fármacos reduce el riesgo de muerte por cáncer de páncreas en un 30% en pacientes con metástasis. Anualmente se diagnostican 5.000 casos en España de los que 4.900 terminan en fallecimiento. La esperanza de vida media en estos casos es de apenas cinco meses.
Las mujeres diagnosticadas con un cáncer de mama invasivo presentan un 39% más de riesgo de desarrollar un segundo cáncer en un sitio diferente del cuerpo. Así lo indica un estudio, liderado por investigadoras españolas, que sugiere que este hecho podría ser debido a que los dos cánceres tienen factores de riesgo similares o al efecto secundario del tratamiento recibido.
Una nueva investigación revela nuevas vías genéticas y nuevos genes implicados en el cáncer de vejiga. Los autores concluyen que la firma genética de las personas afectadas es un primer paso para entender la biología de esta enfermedad y alcanzar un mejor manejo de los pacientes.
Una encuesta elaborada por la Sociedad Española de Oncología Médica en 80 hospitales del país revela que en la mitad de los centros sanitarios encuestados existen limitaciones para alguna de las indicaciones contra el cáncer.