En España existen dos subespecies de esta ave, en el Pirineo y en la cordillera Cantábrica, ambas en declive en las últimas décadas. El primer estudio sanitario de las pirenaicas ha detectado parásitos relacionados con la malaria aviar, así como un nuevo herpesvirus.
Restos fósiles encontrados en la isla de Skye revelan que este animal extinto, bautizado como Ceoptera evansae, pertenece a un grupo más diverso de lo que se pensaba. Estos reptiles voladores persistieron durante más de 25 millones de años.
El pasado año ha sido muy seco y cálido, con la mayor temperatura media anual registrada y con un bajo número de aves acuáticas, anfibios y peces debido a la escasa inundación de las marismas y las lagunas.
La tasa reproductiva anual de la especie es del 7,15% y la mortalidad total, del 12,5%, lo que aboca a su desaparición si no se toman medidas. Cada año mueren más de treinta ejemplares por causas antropogénicas, la mitad de la mortalidad total registrada.
La genotoxicidad implica alteraciones negativas en el material genético de una célula. En el caso de las aves es como si el manual que les indica cómo crecer, cantar, volar o funcionar correctamente se desorganizara o deteriorara.
Investigadores del hemisferio norte quieren erradicar la práctica de bautizar organismos con nombres de personas. Biólogos y paleontólogos del Sur Global se oponen: aseguran que, tras siglos de colonialismo europeo, estos homenajes les permiten ahora visibilizar a pueblos indígenas, mujeres y reconocer a figuras de impacto cultural como futbolistas.
Un nuevo estudio, con participación española, revela los dos eventos de extinción de vertebrados más grandes de la historia provocados por las personas a lo largo de la historia de la humanidad. Los autores también alertan de que estamos viviendo la tercera extinción masiva de aves.
Cuando anidan, estos animales tienen períodos de sueño de más de once horas al día, pero no todos a la vez. Además, se quedan dormidos en miles de ocasiones, pero solo durante unos cuatro segundos, para poder mantener la vigilancia sobre sus nidos.
La Universidad de Granada participa en un estudio internacional que ha analizado la distribución de 115 especies de aves en primavera y 72 que pasan el invierno en diferentes ciudades. Este trabajo aporta información para diseñar áreas urbanas que favorezcan la biodiversidad y el bienestar de la ciudadanía.
El macho de la especie Eptesicus serotinus tiene un miembro reproductor enorme que utiliza para apartar la membrana de la cola de la hembra y poder aparearse por contacto. Este comportamiento, descrito por primera vez en mamíferos, es similar al ‘beso cloacal’ de las aves, en el que se transfiere el esperma utilizando el mismo conducto usado para excretar. Así lo asegura un estudio de investigadores de Suiza y Holanda.