Investigadores españoles e iberoamericanos han publicado un estudio que presenta, por primera vez, la reducción de células inflamatorias en el tejido del colon de animales tratados con goniotalamina. Esta molécula con acciones antitumorales y antiinflamatorias podría ser una nueva diana terapéutica en el tratamiento de pacientes con cáncer.
El grupo de investigación en Farmacología Molecular y Aplicada de la Universidad de Sevilla (FARMOLAP), en colaboración con otro de la Universidad de Campinas de Brasil, y dentro de un proyecto en el que participan expertos de universidades españolas e iberoamericanas, han publicado un estudio que presenta, por primera vez, la reducción de células inflamatorias en el tejido del colon de animales tratados con goniotalamina.
Esta molécula con acciones antitumorales y antiinflamatorias podría ser una nueva diana terapéutica en el tratamiento de pacientes con cáncer. En el artículo publicado en Toxicol Appl Pharmacol destaca además la ausencia de efectos secundarios después de tres meses de tratamiento con goniotalamina de los diferentes modelos de colitis en roedores (ratas y ratones). La inflamación inducida se produce solo en el intestino, no resultando tóxico ni letal para los animales.
Se sabe que la inflamación y la carcinogénesis están estrechamente relacionados en el desarrollo del cáncer: la inflamación crónica es un factor de riesgo para el desarrollo de tumores de la misma manera que los tumores pueden inducir una respuesta inflamatoria que apoya su desarrollo.
“Por lo tanto, las terapias antiinflamatorias son aliadas importantes en la prevención y control del cáncer. Uno de los tipos de cáncer más asociado con los procesos inflamatorios es el cáncer colorrectal. Enfermedades inflamatorias del intestino (tales como colitis ulcerosa y enfermedad de Crohn) son factores de riesgo para el desarrollo de cáncer colorrectal, por lo tanto, el hecho de que el tratamiento con goniotalamina prevenga el desarrollo de la inflamación del colon (colitis) destaca a esta molécula como un fármaco potencial para ser explorado en la prevención de este tipo de tumores”, afirma Débora Vendramini, primera autora del estudio.
Para evaluar los efectos de goniotalamina en el desarrollo de colitis, los expertos utilizaron modelos de colitis inducida químicamente y colitis espontánea (desarrollo debido a una alteración genética que predispone los animales a la enfermedad) en ratas y ratones, respectivamente. Los animales fueron tratados con goniotalamina y al final de los experimentos se comparó la gravedad de la inflamación en animales tratados y no tratados, al tiempo que se evaluó la apariencia del tejido epitelial por medio de análisis histológico, la infiltración de células inflamatorias (análisis histológicos y bioquímicos) y la presencia de transformaciones pre tumorales.
Estos experimentos se llevaron a cabo en el departamento de Farmacología de la Facultad de Farmacia de la Universidad de Sevilla, bajo la supervisión de la catedrática Virgina Motilva, y en los laboratorios del Centro de Investigación, Tecnología e Innovación de la Universidad de Sevilla (CITIUS).
Cómo actúa esta sustancia en las células
Los efectos sobre las células de cáncer de colon humano fueron evaluados a través del tratamiento de las células con goniotalamina y comprobación de la inducción de la muerte celular, investigando en los mecanismos moleculares implicados y así entender cómo actúa en estas células. Para este fin se utilizó la técnica de citometría de flujo (para cuantificar el porcentaje de células viables y no viables) y Western Blotting (evaluación de las proteínas implicadas en este proceso de muerte celular). Parte de estos experimentos se llevaron a cabo en la Universidad de Campinas, Brasil, bajo la supervisión de Joao Ernesto de Carvalho.
“El hecho de no tener efectos secundarios es muy importante, ya que una de las principales razones del fracaso de las nuevas terapias en los ensayos clínicos es la inducción de toxicidad”, destaca Motilva.
Los científicos aseguran que aunque los resultados obtenidos hasta el momento son muy alentadores, el siguiente paso será evaluar si el tratamiento con goniotalamina puede prevenir el desarrollo de cáncer de colon (en curso) y así comprender en su totalidad cómo se produce molecularmente el efecto preventivo. Es necesario completar experimentos para evaluar cómo goniotalamina es absorbida y metabolizada por el cuerpo, para asegurar respuestas seguras antes de proceder para la etapa clínica con pacientes.
Este trabajo ha sido realizado con el apoyo de la Red Ribecancer (CYTED-MICIIN), y también del proyecto PINCANAT donde participan investigadores de la Universidad de Nova de Lisboa, la Universidad de Sorocaba y Campinas, (Brasil), la universidad española de Salamanca, entre otros.
Algas contra el cáncer
El grupo FARMOLAP lleva a cabo además otros proyectos que estudian la aplicación de biomoléculas en modelos de inflamación que derivan en cáncer intestinal o de piel. Así, actualmente se encuentran inmersos en POLFANAT-II, proyecto de excelencia de la Junta de Andalucía, para profundizar en la utilidad de los polifenoles, moléculas orgánicas muy interesantes con representantes típicos como el resveratrol, famoso por las propiedades saludables que otorga al vino tinto.
En este proyecto, coordinado desde la Universidad de Sevilla, participa la universidad mexicana de Hidalgo (UAEH) proporcionando polifenoles que aíslan de invertebrados marinos o de plantas endémicas mexicanas. En POLFANAT también colaboran clínicos de la Universidad de Valencia estudiando los efectos observados en muestras de piel humana o en biopsias intestinales y empresas biotecnológicas como Bionaturis, interesadas en el intercambio de estudios químicos, moleculares, y clínicos.
Referencia bibliográfica:
Vendramini-Costa DB, Alcaide A, Pelizzaro-Rocha KJ, Talero E, Ávila-Román J, Garcia-Mauriño S, Pilli RA, de Carvalho JE, Motilva V. Goniothalamin prevents the development of chemically induced and spontaneous colitis in rodents and induces apoptosis in the HT-29 human colon tumor cell line. Toxicol Appl Pharmacol.2016 Mar 22;300:1-12. doi: 10.1016/j.taap.2016.03.009