La Guardia Civil ha incautado más de una veintena de pinzones azules de Tenerife que un individuo pretendía trasladar de forma ilegal desde el aeropuerto Reina Sofía a Italia. El pinzón azul es una especie presente únicamente en Canarias en todo el mundo, catalogada como amenazada, y que se está viendo afectada por el tráfico ilegal de ejemplares.
La Guardia Civil ha logrado frenar un grave expolio de la fauna amenazada española, al decomisar un total de 21 ejemplares de pinzón azul de Tenerife que pretendían sacarse de forma ilegal de la isla de Tenerife con destino a Milán (Italia).
La intervención ocurrió hace semanas y las investigaciones han seguido hasta ahora. Varias de las aves estaban marcadas por ornitológos, una de ellas con anilla ICONA-Ministerio de Medio Ambiente, lo que ha permitido identificar al ave como un ave silvestre anillada en 2006 en Las Lajas (Vilaflor).
El ave tiene por tanto nueve años. El marcaje de pinzones azules se lleva realizando desde principios del año 2006 dentro de un proyecto de seguimiento de la población para estudiar parámetros de distribución de juveniles, supervivencia, etc.
El tráfico ilegal de especies es una actividad muy lucrativa y aún en la actualidad muy poco controlada, que está llevando a la amenaza extrema y la extinción a muchas especies a nivel mundial. En Canarias, ya se han advertido numerosos casos de tráfico de especies y subespecies endémicas del archipiélago, que resultan muy atractivas para su venta en el mercado internacional dada su singularidad y exclusividad.
Más concretamente, en el caso del pinzón azul de Tenerife ya se tenía constancia de estas prácticas ilegales, en las que los ejemplares son capturados clandestinamente y enviados a diversos países europeos tales como Alemania, Bélgica e Italia, donde son adquiridos por criadores de aves. De hecho, esta práctica está recogida como un factor de amenaza en los distintos documentos y planes de conservación con los que cuenta la especie.
“Este nuevo caso viene a corroborar que esta práctica se mantiene y que debe ser controlada y perseguida de forma contundente ya que puede poner en peligro las poblaciones de esta especie, y especialmente la subespecie de pinzón azul de Gran Canaria, muy amenazada y catalogada en peligro de extinción en los catálogos español y canario de especies amenazadas”, asegura Cristina González, delegada de SEO/BirdLife en Canarias.
Los pinzones azules, endemismos canarios
Viven únicamente en los pinares de Tenerife y Gran Canaria, constituyendo dos subespecies diferentes. La de Tenerife se distribuye por la práctica totalidad de los pinares de la isla gozando de un favorable estado de conservación.
Sin embargo, la subespecie de Gran Canaria se encuentra confinada en dos zonas muy concretas del ya fragmentado pinar de la isla, albergando una población muy pequeña y amenazada que no alcanza los 300 ejemplares.
Los incendios forestales, en gran medida, la pequeña población y los efectos que de ello se derivan, los depredadores naturales e introducidos, los años de escasas lluvias, etc., ponen en serio peligro a esta subespecie.