Científicos, políticos, y ONG están presentes en la Cumbre del Clima en Copenhague (Dinamarca) para decidir un nuevo acuerdo sobre el cambio climático, pero todavía no hay un consenso claro. Lo que sí es evidente es que el recorte de emisiones de CO2 es imprescindible para que el calentamiento global no aumente en 2ºC. Corinne Le Queré, investigadora en la Universidad de East Anglia (Inglaterra) y del Estudio Británico en la Antártida, explica a SINC que es hora de que los países actúen como grupo.
¿Qué pasaría si los países no acuerdan recortes del 40% de sus emisiones de CO2?
Los números que los expertos del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC) sugirieron basados en modelos económicos van de 25 a 40% de reducción de emisiones para 2020 a partir de los niveles de 1990 y esto es para un calentamiento global de máximo 2ºC. Pero las estimaciones del IPCC no incluyen el ciclo de retroalimentación del carbono por lo que no cuentan con la probabilidad de que superemos el calentamiento. Hay un 50% de posibilidades de que rebasemos el límite de los 2ºC sin considerar la retroalimentación del cambio climático. Incluir la retroalimentación ya es un objetivo por encima de los 2ºC.
¿Es posible alcanzarlo?
Cuando examinas estos números científicamente, existe un caso en el que se alcanzan las sugerencias del IPCC. Los números están cerca del 40% para los países industrializados sin perder de vista las emisiones globales que son las que provocan el calentamiento global.
Esta semana sabremos si la UE recorta sus emisiones en un 30%, pero lo propuesto por EEUU no parece ser suficiente según los expertos…
No creo en los compromisos de los países en general, pero creo que como grupo pueden seguir pautas fuertes que logren limitar el calentamiento a 2ºC. Si nos fijamos en todos los compromisos que se han puesto sobre la mesa ahora, estamos más cerca del límite de los 3,5ºC que del de 2ºC. Ahora es necesario averiguar cómo los países van a pasar de los 3,5ºC a los 2ºC. Esto lo tienen que resolver ellos mismos.
¿Qué crees que pasará al final de la semana?
No sabría decirte. Por mi experiencia en pasadas cumbres sé que los debates se aceleran con el tiempo, pero tengo esperanzas porque hay un gran compromiso en limitar el calentamiento global en 2ºC. Hay además cierta conciencia por parte de algunos países de lo que se necesita hacer para alcanzarlo, pero se tienen que tomar las decisiones políticas adecuadas para ello.
Justo antes de la cumbre, salieron a la luz ciertos e-mails enviados por un científico de su universidad que demostraban que los efectos del cambio climático se habían exagerado. ¿Cómo lo explicas?
No hay nada en los e-mails que sugiriera que el calentamiento global no está sucediendo. Hay múltiples líneas de investigación que demuestran que la Tierra se está calentando al igual que la atmósfera, que el nivel del océano está subiendo y que el hielo se está derritiendo. No hay sitio para ninguna otra interpretación de los datos como un todo.
¿Cómo ha surgido entonces la polémica?
Los e-mails que se han hecho públicos se han presentado fuera de contexto. El e-mail particularmente polémico se refiere un truco para esconder los datos, pero si te fijas en lo que interesa en este e-mail es la presentación de una serie de datos y uno de ellos procede de una serie que muestra que no ha habido calentamiento desde 1960 a pesar de que los registros del termómetro mostraran lo contrario. Es claramente una serie poco apropiada para reconstruir el calentamiento desde 1960. Esto lo han tratado los científicos en sus artículos y los datos están ahí. El truco sobre cómo esconder los datos sólo se refiere a la forma de eliminar este dato particular que no es correcto. Si se toman estos e-mails y se presentan fuera de contexto es imposible tener una idea clara sobre lo que está pasando. Hay que mirar los datos del clima y decidirse, pero todo el hielo se está derritiendo en el Ártico, en Groenlandia, en el océano se ve el calentamiento, las estaciones varían y son las evidencias del calentamiento.