Un estudio internacional revela que los cerebros de los primeros mamíferos evolucionaron para tener unos sentidos del olfato y del tacto más sofisticados. Los investigadores analizaron los fósiles de dos especies con más de 190 millones de años y observaron que las áreas del cerebro que controlan estos sentidos experimentaron un crecimiento más avanzado que el resto de zonas.
Escáner tridimensional del fósil de lagarto encontrado en Alemania. Foto: Robert Reisz
Un equipo científico ha reconstruido una de las palmeras más antiguas que se conocen, la especie Sabalites longirhachis, muy cercana al origen del grupo de las palmeras en el Cretácico superior.
Un equipo internacional de científicos, con participación española, ha identificado en la Cueva de La Fragua (Santoña, Cantabria) los restos fósiles de una foca monje, un mamífero marino que está en la actualidad en peligro de extinción y que se asocia a las aguas templadas del Mediterráneo o el Atlántico más tropical. Es la primera vez que se identifica esta especie en la Prehistoria de la Cornisa Cantábrica. El hueso ya forma parte de las colecciones del Museo de Prehistoria y Arqueología de Cantabria.
Interior de la cueva del yacimiento croata de Vindija.
En los años ’80, investigadores españoles hallaron en España los primeros fósiles de Cloudina, un pequeño fósil de aspecto tubular y uno de los primeros animales que desarrolló un esqueleto externo hace entre 550 y 543 millones de años. Ahora paleontólogos de la Universidad de Extremadura han descubierto una nueva especie, Cloudina carinata, cuyo fósil ha preservado su forma tridimensional.
El minucioso estudio de investigadores del IPHES (Institut Català de Paleoecologia Humana i Evolució Social) y del Área de Prehistoria de la Universidad Rovira i Virgili de Tarragona, sobre las abundantes herramientas de piedra y de los restos de fauna en el yacimiento de Vallaparadís demuestra que hace un millón de años ya vivían seres humanos en la zona mediterránea de la península ibérica de Terrassa (Barcelona).
Vista general del yacimiento de Vallparadis, en Terrassa (Cataluña)