Los patrones de migración del virus de la gripe podrían ayudar al diseño de vacunas más específicas.
En otoño, la temporada de gripe comienza y no termina hasta la siguiente primavera. Aunque este patrón cíclico, común en las regiones templadas, es bien conocido, todavía queda por descubrir la fuerza impulsora que lo ocasiona. Ahora, un nuevo estudio explica la evolución y las tasas de migración del virus de la gripe A (H3N2), lo que puede suponer una herramienta más para combatir la enfermedad.
Primera vacuna de la viruela.
Aunque aparecieron con una diferencia de más de 90 años, los virus de la gripe responsables de las pandemias de 1918 y 2009 comparten una característica estructural que les hace a ambos susceptibles de ser neutralizados por los mismos anticuerpos. El hallazgo podría ayudar a diseñar vacunas similares contra futuras cepas pandémicas del virus de la gripe.
Investigadores del centro de salud pública Johns Hopkins Bloomberg (Baltimore, EE UU) han analizado el uso mundial de la vacuna contra la bacteria Haemophilus influenzae tipo B (Hib), responsable de unos tres millones de enfermedades graves y de casi 400.000 muertes anuales, para determinar qué factores intervienen en su adopción por parte de una nación.
El estudio abre una nueva vía en la investigación de futuras alternativas terapéuticas para controlar el virus de inmunodeficiencia Humana (VIH) y la propia enfermedad del sida. Por primera vez se demuestra que la producción de las moléculas α-defensinas 1-3 por las células dendríticas retrasa la progresión de la infección. Cerca un 5% de pacientes son capaces de controlar de manera natural la infección sin terapia antiretroviral.
En pleno debate sobre la conveniencia de destruir las últimas muestras del virus conservadas en EE UU y Rusia, una decisión que pospuso hasta 2011 la Organización Mundial de la Salud (OMS), un equipo del Centro de Biología Molecular Severo Ochoa (CSIC- UAM) ha logrado caracterizar la proteína con la que el virus de la viruela inhibe al interferón, la primera línea de defensa del organismo del ser humano. La investigación abre la puerta al desarrollo de nuevos tratamientos ante una hipotética epidemia.
Muestras de vacuna del virus H1N1.