Escuchar las advertencias meteorológicas, reaccionar con antelación, rehabilitar viviendas, limitar el transporte privado y, sobre todo, contar con planes de contingencia basados en experiencias de otros países son algunos de los consejos de los expertos.
Una mujer camina por una carretera nevada en las inmediaciones de l’Espluga de Francoli (Tarragona), uno de los pueblos catalanes afectados por el temporal de nieve. / EFE
Toda la península ibérica y las islas Baleares están inmersas desde ayer en la primera gran ola de frío desde hace tres inviernos. Pero las nevadas intensas, como la que está afectando sobre todo al norte peninsular y Baleares, no son tan comunes en el resto de la geografía española. Un equipo de investigadores ha analizado la nevada extrema que afectó en marzo de 2011 a la provincia de Madrid. Los resultados permitirán entender y predecir episodios similares en un futuro.
La Red de boyas de Aguas Profundas de Puertos del Estado ha medido la ola individual más alta de la historia registrada en aguas españolas. Esta ola de récord midió 27,81 metros de altura, de valle a cresta, y tuvo lugar en enero de 2014 en Cabo Vilán (A Coruña).
Frailecillo recogido para su recuperación. / © Aitor Rincón García.
Tras 20 años de monitorización en las islas Medes sobre las poblaciones de erizos de mar (Paracentrotus lividus y Arbacialixula), las más comunes en el Mediterráneo, un equipo de investigadores españoles revela ahora qué procesos regulan a largo plazo las poblaciones naturales de erizos de mar. Según el trabajo, el violento temporal que afectó a las costas catalanas el 26 de diciembre de 2008 provocó la desaparición de cerca del 80% de la población de erizos marinos en el archipiélago de las Medas y la costa del Montgrí.
En 2008 un violento temporal afectó a buena parte de las costas del norte de Cataluña, provocando grandes daños económicos y humanos. Un artículo de la Universidad de Barcelona afirma que el fenómeno tuvo al mismo tiempo un efecto beneficioso a grandes profundidades, ya que provocó una inyección masiva de carbono orgánico de origen marino a través de los cañones submarinos.