La covid-19 ha afectado a la situación económica, laboral y familiar de las personas y ha impactado enormemente en nuestra salud mental. Países como España sufren un repunte de casos de ansiedad, depresión y estrés.
Según la encuesta de Salud Mental del CIS en España, tan solo el 16,9 % de los hombres reconoció haber llorado por la pandemia, frente a un 52,8 % de las mujeres. El llanto, que nos acompaña desde que nacemos, no está influido solo por las hormonas. Influyen las normas sociales, la cultura y la personalidad.
La primera encuesta nacional de Salud Mental elaborada por el CIS revela cómo la pandemia ha mermado el estado emocional de la ciudadanía.
Junto con las futuras olas de contagios de la covid-19, la OMS y la ONU esperan la llegada de problemas de salud mental que impactará especialmente en el personal sanitario. La clave para reducir este daño, según el director del Instituto de Psiquiatría y Salud Mental del Gregorio Marañón, es flexibilizar la atención psicológica, acercar los recursos y velar por una atención primaria sin colapsos.
El 10 de octubre se celebra el Día Mundial de la Salud Mental, que este año viene marcado por la pandemia de la covid-19. El nuevo coronavirus está teniendo un gran impacto psicológico, especialmente entre los más mayores, y sus verdaderas consecuencias no se conocerán hasta más adelante. Hablamos de ello con el secretario de la Sociedad Española de Psicogeriatría.
Un nuevo estudio revela cómo el elevado número de búsquedas online sobre problemas de salud mental que los ciudadanos de EE UU han realizado durante los meses de máxima incidencia del coronavirus pone de manifiesto la necesidad de incrementar los servicios sanitarios del país.
Un equipo liderado por instituciones españolas ha comparado la vivencia del trastorno depresivo de unas 400 personas mayores residentes en España y en Nigeria. En España la fatiga y el cansancio son síntomas prevalentes mientras que en Nigeria lo es la desesperanza.
Las personas con trastorno mental serán uno de los grupos más afectados tanto por la crisis de Salud Pública como por sus derivadas económicas, según alerta un estudio liderado por el Hospital Gregorio Marañón. Los investigadores exigen potenciar la telepsiquiatría, la hospitalización domiciliaria y la atención a grupos vulnerables.
Un nuevo estudio identifica los beneficios que aporta al estado de ánimo y al bienestar personal dar caminatas breves y frecuentes por lugares con agua. Para los autores, identificar estos elementos es clave para el desarrollo de ciudades más habitables, sostenibles y saludables.
A principios de 2020, los síntomas de depresión y ansiedad y el miedo a sufrir agresiones en el trabajo empeoraron entre los médicos residentes en Shanghái, una de las primeras urbes en hacer frente al coronavirus. “Necesitamos priorizar el bienestar de los trabajadores de la salud, no solo por ellos, sino también por los pacientes que los necesitarán en los próximos meses”, reclama el investigador principal.