Hasta ahora, los salmones rojos juveniles del Pacífico permanecían cerca de dos años en sus lagos o arroyos de nacimiento antes de dirigirse al océano. Un nuevo estudio muestra que este fenómeno se está produciendo antes por el cambio climático. Una vez en el mar, los peces, protagonistas de #Cienciaalobestia, tardan más en madurar y crecer.
Investigadores de la Universidad de Oviedo han analizado por primera vez un fragmento de ADN de piensos comerciales para cíclidos de acuario, salmones de acuicultura y peces marinos de acuario. Los resultados demuestran que para fabricar este alimento se han empleado ocho especies diferentes de peces marinos de altos niveles tróficos, en parte procedentes directamente de pesquerías extractivas.
El número de peces ha disminuido porque las poblaciones han alcanzado sus niveles de explotación máximos. Imagen: Mr Jorgen.
En el río gallego del Tambre, donde las poblaciones de salmones habían desaparecido en la última década, el hallazgo de 60 salmones (Salmo spp.) adultos en 2005 ha sorprendido a científicos y pescadores. Los análisis genéticos aportan ahora una evidencia científica: estos salmones no son originarios del río Tambre, sino del Ulla, un río vecino. Los esfuerzos de conservación y recuperación de esta especie en algunas cuencas pueden haber provocado que los peces hayan retornado por error al río que, en realidad, no les vio nacer.