El planeta está en peligro, ya que muchos ‘elementos críticos climáticos’ han sido transgredidos y otros están a punto de atravesar sus umbrales de no retorno, según un estudio en el que participan científicos españoles. Los expertos consideran fundamentales las nociones de equidad y seguridad para preservar la vida, más allá del tope a las temperaturas globales de la atmósfera.
La pandemia pospuso a este verano de 2021 los JJ. OO. de Tokio, previstos en 2020. Mañana comienza uno de los acontecimientos más caros y seguidos del mundo, pero no por ello más sostenibles. Después de diez años estudiándolos, el profesor de Geografía Martin Müller señala que estos megaeventos podrían convertirse en motores de cambio hacia una transición sostenible, pero aún no lo son.
Un estudio ha permitido diseñar en la ciudad de Nueva York dos intervenciones para reducir la ratio de incomparecencias judiciales por infracciones leves, evitando más de 30.000 órdenes de arresto en tres años. El éxito de las actuaciones se ha asegurado comunicando de manera clara cuándo y dónde acudir, y mandando recordatorios por SMS.
Si alguien perjudica a otros, los humanos tendemos a querer que se le castigue para que no se vuelva a repetir su mala acción. Un equipo de científicos ha analizado los orígenes de esta motivación en unos experimentos con niños y con chimpancés y concluye que tanto los grandes simios como los niños a partir de los seis años quieren ver cómo el otro recibe el castigo.
A pesar de lo logrado en las últimas décadas, las mujeres no disfrutamos de las mismas oportunidades para trabajar que los hombres ni del mismo reconocimiento en relación a nuestra aportación profesional. La mirada al presente refleja injusticia para la mitad de la población mundial. Somos nosotras, sobre todo las jóvenes, el principal fermento de la justicia de género. La formación en el conocimiento científico nos da legitimidad para defendernos y desmontar los estereotipos negativos que inhiben nuestro empoderamiento.
Los niños y niñas con con discapacidades intelectuales, del desarrollo, cognitivas y psicosociales todavía se encuentran con dificultades a la hora de acceder a la Administración de Justicia en igualdad de condiciones con el resto de ciudadanos. Esa es una de las principales conclusiones de un estudio desarrollado en diez países europeos, incluida España.
¿Aceptaría un reparto donde a usted le dieran una golosina y a otra persona cuatro? ¿Y si fuera al revés? Un equipo de científicos se lo ha planteado a más de 1.600 niños de siete países de entre cuatro y quince años, y han encontrado una respuesta negativa unánime ante las desigualdades y el abuso de poder. Algunos incluso protestaban aunque salieran ganando.
Una amplia revisión de estudios sobre la moral de primates y otros animales prueba que las especies cuyos individuos cooperan entre sí son muy sensibles ante las desigualdades. Los monos capuchinos, por ejemplo, se rebelan cuando reciben un premio menos sabroso que el del compañero. Solo los humanos y algunos primates, como los chimpancés, somos capaces de quejarnos si el reparto es injusto para el prójimo; y lo hacemos para evitar futuros conflictos.
Una investigación europea revela que las reacciones humanas ante las situaciones injustas se producen de manera automática debido a un aumento de la actividad de la amígdala cerebral. Según el estudio, los hombres muestran una mayor agresividad que las mujeres ante este tipo de situaciones.