Desde que la Estación Biológica de Doñana tiene registros, nunca se había secado dos veranos consecutivos. La grave sequía y la sobreexplotación del acuífero son las causas de la situación en la que se encuentra el sistema de lagunas de Doñana.
La nueva proposición de ley que se tramita en el parlamento andaluz, para aumentar el área de regadío del cultivo de la fresa en el entorno de este parque nacional, supone una amenaza para sus ecosistemas. Lo advierte un estudio de investigadores del proyecto europeo WaterLands.
La ruptura de una balsa minera de la empresa Boliden contaminó el corredor del río Guadiamar y los vertidos llegaron a las puertas del Parque Nacional de Doñana, hace 25 años. En aquel momento, Miguel Ferrer era el director de la Estación Biológica de Doñana del CSIC, una institución con un papel fundamental en su recuperación. En la actualidad, este paraje natural único sigue amenazado por la sequía y la sobreexplotación de acuíferos.
El fumarel común, el porrón pardo, la cerceta pardilla, el aguilucho lagunero o la pagaza piconegra figuran entre las poblaciones de aves reproductoras que han sufrido un marcado descenso en el parque nacional. El declive, que comenzó hace una década, se ha acelerado desde 2019, advierte SEO/BirdLife.
Más de la mitad de las lagunas del Parque Nacional de Doñana han desaparecido en las últimas décadas. Estas se asientan sobre arenas permeables y su inundación se produce anualmente cuando la lluvia recarga el acuífero, que cubre un área aproximadamente cinco veces mayor que la del parque. En esta zona se desarrollan otras actividades económicas como la agricultura y el turismo.
La laguna de Santa Olalla se secó a finales de agosto del año pasado, y las cifras de aves acuáticas invernantes en el Parque constituyeron el segundo valor más bajo de la serie histórica. Además, la lluvia fue muy escasa, según un informe de la Estación Biológica de Doñana.
Es la tercera vez desde que se tienen registros que se seca Santa Olalla, la laguna permanente más grande de Doñana. Ocurrió también en 1983 y 1995. Desde la estación biológica, los expertos advierten de que la actual sequía no es la única causa, la sobreexplotación del acuífero es también responsable de la gravedad de la situación.
Durante las últimas décadas se han registrado niveles de precipitación por debajo de la media en Doñana. El año hidrológico actual está encaminado a ser uno de los más secos de toda la serie histórica, la cual abarca casi 50 años de registros.
Un total de 25 sociedades científicas estatales y 1.109 científicos e investigadores se oponen, a través de un manifiesto, a la nueva propuesta de legalización de cultivos en el entorno del Parque Nacional de Doñana. Los expertos afirman que esto podría agravar aún más la difícil situación en la que ya se encuentra el espacio natural.
Investigadores de la Estación Biológica de Doñana han descrito una nueva especie de abeja del género Andrena en la zona de los Pinares de Aznalcázar. La nueva especie fue detectada en un muestreo realizado por el equipo en las principales áreas protegidas de Doñana entre 2015 y 2021.