La mayoría de dinosaurios parecidos a las aves, los celurosaurios, se alimentaban de plantas.
Un estudio, que se publica en Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS), ha utilizado análisis estadísticos para determinar la dieta de 90 especies de dinosaurios terópodos. Los resultados demuestran que los celurosaurios, los que se parecían a las aves entre los que se encuentran el Tyrannosaurus rex, se alimentaban de plantas de forma habitual.
Un equipo internacional de investigadores demuestra en Science que la extinción de los dinosaurios hace 65 millones de años permitió que los mamíferos se hicieran más grandes (unas 1.000 veces más de lo que eran). Es el primer estudio en demostrar el nuevo patrón de aumento del tamaño corporal de los mamíferos tras la desaparición de los dinosaurios.
Investigadores del Grupo de Investigación del Mesozoico del Instituto Catalán de Paleontología (ICP) han descubierto el nido con 28 huevos de dinosaurio más grande de Europa en el yacimiento de Coll de Nargó (Lleida). El hallazgo permite confirmar la hipótesis de que los saurópodos enterraban sus huevos dentro de la tierra como las tortugas actuales.
Un equipo de científicos españoles ha sistematizado los datos de 29 yacimientos de restos de dinosaurios en el Pirineo catalán, y confirma que, poco antes de su extinción, la diversidad de especies de dinosaurio era muy grande. Esta conclusión, junto al descubrimiento de la presencia de un grupo de dinosaurios asiáticos sólo un millón de años antes de la extinción, refuta las hipótesis que defienden que la catástrofe fue sólo el punto final de un proceso de extinción más gradual.
Un equipo de investigadores de la Universidad de La Rioja (UR) y de la Universidad de Rabat, dirigidos por Félix Pérez Lorente (responsable del grupo de Geología y Paleoicnología de la UR) iniciará el próximo 18 de marzo la Campaña de icnitas en el Alto Atlas (Marruecos). Se trata de la misma zona y equipo que describió las huellas de dinosaurio carnívoro más grandes del mundo.
Un equipo internacional de 41 científicos, en el que participa la Universidad de Zaragoza (UNIZAR), confirma que la extinción masiva producida hace 65,5 millones de años, que acabó con la era de los dinosaurios, fue provocada por el impacto de un asteroide de 12 kilómetros de diámetro en la Península de Yucatán (México). El estudio aporta nuevas evidencias geológicas que fortalecen esta hipótesis.
Mapa de gravedad en 3D del cráter de Chicxulub (México).