El satélite europeo Sentinel-5P ha detectado una caída significativa en las concentraciones de dióxido de nitrógeno en el norte de Italia entre febrero y marzo. La disminución de este compuesto, emitido por los vehículos, coincide con las medidas adaptadas para evitar el avance de la enfermedad, que han provocado una reducción del tráfico y las actividades industriales.
Investigadores de varios centros europeos han identificado las principales fuentes de exposición al plomo en el buitre leonado, elaborando mapas de riesgo asociado a este contaminante en el espacio y en el tiempo. Estos mapas pueden ser una herramienta útil para mitigar los efectos de contaminantes altamente tóxicos.
Investigadores de la Universidad de Jaén han diseñado una técnica rápida y sencilla para determinar a la vez 13 disruptores endocrinos, unos contaminantes que alteran el equilibrio hormonal del organismo. El procedimiento combina procesos físicos y químicos para localizar de forma precisa estos compuestos en muestras de orina, sangre y leche materna.
Las temperaturas y concentraciones altas de contaminantes, que se dan en la ciudad, permiten interpretarla como un laboratorio 'abierto', por lo que un grupo de ecólogos sugiere usar las plantas urbanas como herramienta para estudiar el cambio global.
Un estudio internacional, con participación de la Universidad de Granada, ha demostrado que la exposición a un contaminante químico denominado PCB-153 se asocia positivamente con el riesgo de padecer cáncer en varones. Este compuesto, prohibido en España desde los años 80, está presente aún en muchos alimentos ricos en grasas, como los pescados grasos de gran tamaño.
El lindano, utilizado por los agricultores como insecticida y plaguicida, es un compuesto tóxico que asimilan los seres vivos y que se ha vertido durante años al medio ambiente. Ahora la Universidad del País Vasco (UPV/EHU) y Tecnalia buscan soluciones para eliminar las consecuencias de su uso con nanopartículas de hierro.
La Unidad de Construcción de Tecnalia, en el marco de su apuesta por la sostenibilidad, ha desarrollado una nueva generación de cementos respetuosos con el medio ambiente que permiten reducir hasta en un 100 % las emisiones directas de CO2 a la atmósfera.
Pedro Fuertes comenzó su tesis doctoral en la Universidad de Burgos para estudiar moléculas de azufre y nitrógeno, y comprobar sus propiedades. Esas moléculas se denominan heterociclos. 'Hetero' por la ausencia de carbono y 'ciclo', porque los átomos se disponen en forma de corro. La casualidad hizo que las investigaciones que se desarrollaban en el Departamento de Químicas dieran con una composicion que cambiaba de color ante la presencia de sustancias contaminantes como el mercurio.
La semana pasada, dos cadenas de supermercados eliminaron las bolsas de plástico que entregaban gratis, y las sustituyeron por otras reutilizables y con coste. Las reacciones no han tardado: unos aplauden la decisión, otros promueven un cambio social para fomentar el reciclaje. A partir de 2010, España reducirá un 50% las bolsas de un solo uso, y pondrá a prueba a la población.
Una nueva técnica permitirá en un futuro próximo reciclar metales muy contaminantes que se acumulan en el catalizador de los tubos de escape de los coches. En concreto, se trata del paladio, un elemento caro y contaminante, que forma parte de los catalizadores, con los que se reduce la emisión de gases de los vehículos a la atmósfera. Andrei Rogalev, un destacado experto del laboratorio europeo de Radiación de Sincrotrón en Grenoble (Francia), ha presentado en Zaragoza una técnica para recuperar este metal procedente de los catalizadores, una vez que éstos se agotan por efecto de la propia contaminación. De este modo, además de lograr su reciclaje se evitan los efectos de su degradación, con un alto potencial contaminador.