Investigadores del Instituto de Biología Evolutiva y otros centros internacionales han descrito una variante genética que confiere resistencia a la infección de Chagas en habitantes amazónicos. Es el primer estudio que demuestra que los humanos que habitaban América sufrieron selección natural a causa de un patógeno: el parásito Trypanosoma cruzi.
Las regiones altamente endémicas para el chagas muchas veces no cuentan con laboratorios suficientemente equipados. Un nuevo estudio confirma cómo unir dos pruebas rápidas podría facilitar el diagnóstico de personas crónicamente infectadas.
Investigadores de la Universidad Autónoma de Madrid han logrado secuenciar y ensamblar dos nuevos genomas del parásito Trypanosoma cruzi, responsable de una de las enfermedades tropicales más desatendidas, la enfermedad de Chagas. Los resultados, publicados en Scienitific Reports, podrían contribuir positivamente en la investigación de esta enfermedad.
Un equipo del CSIC ha demostrado que un tipo de células del sistema inmunitario se multiplica en pacientes con el mal de Chagas para proteger la propagación del parásito y eliminándolo así de las infectadas. Esto sucede tras aplicar el tratamiento médico en la fase crónica de la patología. Según datos de la Organización Mundial de la Salud, en España esta enfermedad tropical afecta a unas 70.000 personas.
Investigadores del Centro de Biología Molecular han demostrado que la ingesta de un suplemento de L-arginina controla eficazmente en ratones la replicación del parásito que produce la enfermedad de Chagas, reduciendo drásticamente la mortalidad. El chagas es una enfermedad que se transmite por medio de insectos; es común en Centro y Sudamérica, aunque actualmente se encuentra en zonas no endémicas como España.
Dos estudios clínicos evalúan de manera sistemática la frecuencia y tipo de efectos adversos provocados por el benznidazol, el fármaco más utilizado para tratar el chagas. Los autores observaron efectos secundarios en 85 de los 99 participantes, con una media de tres reacciones adversas por paciente. El 90% de estas fueron leves o moderadas y aparecieron durante el primer mes de tratamiento.
Un nuevo estudio del Instituto de Salud Global de Barcelona recomienda implementar un programa sistemático de cribado para la enfermedad de Chagas y la infección por estrongiloidiasis, provocada por el parásito intestinal Strongyloides stercoralis. Estas dos enfermedades desatendidas van de la mano en personas procedentes de Latinoamérica.
Investigadores españoles han experimentado in vivo cómo se activa el sistema inmunitario durante la gestación ante el mal de Chagas. Los resultados muestran que el riesgo de transmisión del parásito de la madre al bebé aumenta si el cuerpo no detecta la enfermedad y confirman que, suministrando medicación específica antes de la gestación, las probabilidades de contagio son prácticamente nulas.
Investigadores españoles han descrito patrones patológicos comunes a todos los genotipos del parásito que causan chagas. Estos resultados, publicados en Scientific Reports, pueden mostrar mejor la fisiopatología de dicha patología, así como a mejorar su diagnóstico y el seguimiento de los pacientes. En aproximadamente un 30% de los casos, la enfermedad se convierte en crónica.
Un equipo de investigadores, liderados desde la Universidad de Barcelona, ha desarrollado reacciones multicomponente de interés potencial para obtener sustancias activas contra los parásitos que causan la tripanosomiasis, la enfermedad del sueño. Las reacciones multicomponente son protocolos que facilitan la síntesis química de nuevos compuestos.