El 26 de mayo de 1908 se encuentra petróleo en Persia
Imagen de satélite en el momento del vertido de BP.
Durante una misión aerotransportada que estudió los efectos sobre la calidad del aire del vertido de petróleo de BP en junio de 2010, investigadores de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés) descubrieron un nuevo mecanismo a través del que se forman las partículas contaminantes del aire. Este mecanismo de contaminación podría cambiar el modo en el que se predice la calidad del aire urbano.
El 20 de abril explotó la plataforma petrolífera de BP en el Golfo de México. Desde entonces la mancha de crudo se ha ido expandiendo en el océano. Científicos estadounidenses presentan ahora en Science la primera medición independiente sobre el volumen del vertido. En total se han derramado a diario hasta el 15 de julio de 56.000 a 68.000 barriles de petróleo (cada barril son 158 litros).
Mapa del 30 de junio con previsiones a 3 días.
Un grupo de investigadores noruegos ha comparado la normativa de seguridad de la industria petrolera en EEUU, Noruega y Gran Bretaña. Según sus conclusiones, un accidente tan importante como el de la plataforma petrolífera Deepwater Horizon en el Golfo de México podría haber ocurrido en el Mar del Norte, sin embargo el modelo organizativo noruego reduce ese riesgo.
El 20 de junio se cumplen dos meses del hundimiento de la plataforma petrolífera Deepwater Horizon de British Petroleum (BP) que sigue expulsando en el Golfo de México entre 35.000 y 60.000 barriles de petróleo diarios. La catástrofe recuerda al Prestige, que hace casi ocho años tiñó las costas gallegas de negro y provocó la muerte de más de 22.000 aves marinas. Todavía sin datos concretos, los expertos ya hablan de la mayor catástrofe ecológica de EE UU.