Ocho meses después del vertido de crudo en el Golfo de México, Estados Unidos ha presentado la demanda contra la empresa British Petroleum, BP.
Cuando en abril explotó la plataforma petrolífera se desató una fuga que vertió al mar casi cinco millones de barriles de crudo. Ha sido el mayor desastre ecológico del país y el Gobierno de Obama reclama a BP y a otras ocho empresas que se hagan cargo de los gastos de limpieza y de las indemnizaciones. La cuenta podría ascender a los 15 mil millones de euros.