Una de cada cuatro personas mayores de 65 años, altamente dependientes y que son cuidadas en domicilio pueden sufrir maltrato. La negligencia (16,4%) y el abandono (7,7%) son los principales tipos de abuso registrados. De ellos, el 40% partiría de su entorno (familiares y cuidadores) y el resto de los profesionales (sanitarios y de servicios sociales) responsables de su asistencia.