Muchas bacterias pueden fabricar imanes nanométricos de óxidos de hierro –magnetita- que utilizan para orientarse en el campo magnético de la Tierra, como una brújula, y que interesantes para tratamientos oncológicos y entrega de fármacos. Ahora investigadores vascos han averiguado cómo se producen, lo que abre la puerta a la producción de nanopartículas en grandes cantidades.
Científicos de la Universidad de Granada (UGR) han patentado un nuevo transportador de fármacos, basado en nanopartículas mixtas, que permite liberar de manera controlada el principio activo que lleva dentro. Este avance hará posible diseñar tratamientos más eficaces contra el cáncer y también contra enfermedades relacionadas con la inflamación, como la artritis, artrosis, faringitis, laringitis, colitis o conjuntivitis, señala la institución.
Investigadores del Instituto de Investigaciones Tecnológicas de la Universidad de Santiago de Compostela trabajan en el diseño de nanopartículas que combatan las células cancerígenas mediante calor. El hallazgo consiste en aumentar la temperatura por encima de los valores considerados como normales –hipertermia– mediante campos magnéticos.
Una herramienta basada en la técnica de liberación controlada de fármacos por calentamiento inductivo es útil para el desarrollo de nuevas terapias oncológicas. Combina nanopartículas, nanogeles, anticuerpos, campo magnético y calor en búsqueda de un suministro de fármacos más eficiente, con menor toxicidad para el cuerpo y una mejor calidad de vida.
La revista digital 'Nature Communications' se hace eco de los resultados de un estudio coordinado por científicos españoles en torno a las propiedades de determinadas nanopartículas dieléctricas, debido a su forma inusual de difundir la radiación electromagnética, que abren nuevas puertas en el campo del control de la dirección de la luz.
Investigadores de la Universidad Carlos III de Madrid colaboran con la empresa CEOSA-Euroortodoncia en el desarrollo de una nueva generación de brackets de plástico transparente con nanopartículas que aumentan la resistencia y mejoran las propiedades del material.
La Escuela de Medicina de la Universidad de John Hopkins (EE UU) ha desarrollado nanomoléculas portadoras de fármacos que penetran la mucosidad de la vagina de hembras de ratón. Se espera que, en el futuro, se apliquen en humanos para mejorar el tratamiento y la prevención de enfermedades de trasmisión sexual.
El desarrollo de polímeros inteligentes puede ayudar a crear materiales con 'memoria de forma' que se autorreparen en el futuro, todo un reto para las industrias electrónica y automovilística. En esta línea trabajan investigadores de la Facultad de Ciencia y Tecnología de la Universidad del País Vasco (UPV/EHU).