Investigadores del Centro Nacional de Biotecnología del CSIC, en colaboración con la Universidad Johns Hopkins de EE UU, han desarrollado un nuevo protocolo de vacunación que consigue eliminar en ratones la infección por Plasmodium, el parásito causante de la malaria.
Un nuevo juego online, diseñado por investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), reta a los internautas a encontrar parásitos de malaria en imágenes reales digitalizadas de muestras de sangre. Este experimento permitirá comprobar la viabilidad del telediagnóstico colectivo (crowd-sourcing) y establecer una comunidad de ciudadanos científicos (jugadores) capaces de ayudar a diagnosticar esta enfermedad online.
Ha dedicado su vida a la lucha contra la malaria, cuyos entresijos no ha dudado en explicar, lápiz en mano, en el día mundial de la enfermedad. Pedro Alonso ha estado esta semana en Madrid para asistir a las jornadas La contribución española en malaria y los esfuerzos para su eliminación en la Fundación Ramón Areces.
Una vacuna podría proteger a la mitad de los niños expuestos a la malaria en África. Los primeros resultados del ensayo clínico de fase III de la vacuna RTS,S, publicados en el New England Journal of Medicine, muestran la alta eficacia en la protección frente a esta enfermedad, que solo en 2009 provocó 781.000 muertes.
Cada año se dan 250 millones de nuevos contagios de malaria. Foto: US Army.
Científicos de la Universidad de Stanford y de la Universidad de California en San Francisco (EE UU) han desarrollado una técnica para ‘desarmar’ al parásito de la malaria que consiste en hacerlo depender del suministro externo de una sustancia química vital. La cepa domesticada de Plasmodium, el parásito unicelular causante de la malaria, podría dejar de provocar la enfermedad.
Un estudio liderado por investigadores de la Universidad de Oxford (Reino Unido) indica cómo registrar el número de parásitos de la malaria que viven en el torrente sanguíneo del anfitrión durante una infección. El trabajo, publicado hoy en la revista Science, supone una nueva herramienta para investigar a los parásitos de la malaria, incluso en pruebas de vacunas y fármacos.
Una investigación internacional ha identificado tres clases de moléculas aromáticas que impedirían a los mosquitos detectar a las víctimas de sus picaduras, al bloquear sus receptores de CO2. El hallazgo podría servir para controlar la propagación de dolencias como la malaria, el dengue o la fiebre amarilla, transmitidas por estos insectos.
Una variante genética disminuye un 30% el riesgo de malaria.
Los casos de malaria pueden reducirse gracias a una predisposición genética al suicidio celular. Un nuevo estudio, publicado hoy en la revista PLoS Genetics, identifica una reducción de casi un 30% de desarrollar malaria severa, una enfermedad que causa la muerte en aproximadamente un millón de personas cada año, en las personas con esta variante.