Solo en España, más de 22.000 personas viven gracias a la hemodiálisis, un procedimiento que permite conservar la vida cuando los riñones no cumplen su función, pero que lleva asociadas ciertas complicaciones. En ellas se ha centrado un equipo internacional liderado desde Oviedo, que está analizando el tipo y la efectividad de distintas estrategias para el tratamiento de pacientes en diálisis en Europa.
Parte del equipo investigador del Servicio de Metabolismo Óseo y Mineral del HUCA que ha participado en el proyecto COSMOS. Segundo y tercero por la derecha, Jorge Cannata Andía y José Luis Fernández Martín. Foto: Laura Alonso Ortega / UCC+i FICYT.
Los 227 centros europeos de hemodiálisis que participaron en el estudio. Imagen: J. Cannata Andía.
La debilidad de los huesos aumenta el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares. Si hasta ahora el corazón y el sistema óseo parecían tener más bien pocas relaciones directas entre sí, la Unidad de Investigación del Servicio de Metabolismo Óseo y Mineral del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) trabaja para afilar una visión integradora, que permita observar en detalle cómo se interrelacionan el “chasis” y el “motor” del cuerpo. El enlace es el proceso de calcificación vascular.